Quackitoier | Spiderduck - Mi flor morada.

«6» ¿En tu..casa? (🔞)

Contenido NSFW.

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Pov de Quackity.

Se sentía muy extraño consentir a alguien que no está con sus 5 sentidos, pero una cosa es segura.
Los borrachos no mienten, y él me necesitaba. Por primera vez, él me necesitaba ahí a mí.

Terminé de quitarle la camisa, y le di besos en el cuello y hombros, asegurándome de no marcarlo. Con mucha suavidad lo besaba, pasando mi lengua por su piel, específicamente donde tenía marcas de Cellbit.

Lo recosté en la cama,subiendome encima.

-Q-Quackity..- Levanté la mirada, dándole mis manos para entrelazar nuestros dedos.

-Dime, mi amor.-

-Esto no está bien.. yo sé que no estoy pensando con claridad, solo sé que ahora te deseo mucho. ¿S-Seguro que quieres seguir? Yo entiendo si..-

Tomé un respiro procesando su estado y palabras, ahora dándole besos lentos en el cuerpo.

-Sí, mi arañita.- Continué con una sonrisa. -Ahora relájate, necesitas poder dialogar con esa bestia por lo pronto. O al menos estar tranquilo para poder volver con los demás y que no sientan que te fuiste tanto tiempo conmigo.- Bajé a besar su vientre.

-Quacks..- Volvió a llamarme,parecía no estar seguro en su voz. Pero, era más inseguridad y culpa que rechazo.

-Estás en mis manos.. Estarás bien.- Subí mis besos a su pecho,y me ganaron los pensamientos intrusivos.

-Q-Quackity!~- Se retorció un poco cuando acerqué mi lengua a su pezón. -Dijiste que.. no ibas a..- Jadeaba, presionando sus dedos en mi espalda.

-No, no voy a hacerlo. Es diferente tocarte que tener relaciones.- Expliqué con una leve sonrisa, maltratando su pezón con mi lengua.

-P-Pero.. ah, Quacks..- Se volvió a quejar, y me encargué de satisfacer su otro pezón, moviendo mi mano al otro.

-Esto no es más que hacerte sentir bien a ti.- Dije, con paciencia. -¿Te gusta? ¿O debería detenerme?- Subí mi mirada para ver si estaba mirándome o algo por el estilo. Pero cerraba sus ojos con fuerza, reteniendo sus sonidos.

-S-Sigue..- Apenas pudo hablar, y subí un poco para besar su cuello, y susurré en su oído.

-La música está muy fuerte. Nadie más que yo te va a escuchar.- Dije, volviendo a besar y lamer su pezón. -No retengas tus sonidos, déjame escuchar tu dulce voz.-

Lo sentí gemir al instante, y rápidamente mi cabello fue tomado entre sus dedos, entre caricias y suaves tirones de cabello.

Yo no quería nada más que darle cariño y distraerlo un rato, eso era cierto.
Pero no pude ignorar que estando encima de él para besar su cuerpo, sentí una erección por parte de Roier en mi abdomen, tapada por sus jeans.

-Q-Quacks,me duele..- Se quejó apretando mis hombros.

-Roier.. Sabes que no puedo..- Me quejé, ya que mis planes eran ayudarlo a calmarse para que vuelva con los demás y ya.