Yo en The Walking Dead

19

El claro, rodeado por un bosque denso y miles de cadáveres, se preparaba para sumirse en la oscuridad de la noche.

La casa abandonada, con su fachada desgastada y sus ventanas rotas, se erguía como un espectro silencioso en el borde del claro. Los caminantes, miles de ellos, permanecían inmóviles a las órdenes de Némesis, un ejército de cuerpos inertes que sólo esperaban el comando para moverse. La atmósfera estaba cargada de tensión, y la llegada inminente de la noche añadía una capa de inquietante oscuridad.

Logan, con el AR-15 en la mano y preparado, se encontraba frente a su adversario más temido. La figura colosal de Némesis, desprovista de sus armas pero no de su imponente presencia, proyectaba una sombra amenazadora. Sus músculos deformes y su piel cicatrizada con su rostro una mezcla de odio y determinación.

Logan apretó los dientes por el breve enfrentamiento anterior y disparó una ráfaga de balas, el "bang bang bang" resonando en el claro.

Las balas impactaron en el pecho de Némesis, haciendo que el monstruo retrocediera ligeramente. Sin embargo, el daño fue mínimo por no decir niño

Némesis rugió, un sonido gutural que sacudió el aire y reverberó en el suelo, desafiando la efectividad de los disparos. El monstruo avanzó con pasos pesados, cada pisada haciendo temblar la tierra.

Logan se movió con rapidez por el poco terreno disponible, disparando ráfagas controladas apuntando sobre todo en el rostro, para mantener la distancia de Némesis y los caminantes.

Entonces Némesis saltó muy alto de una manera que desafiaba las leyes de la gravedad por su enorme tamaño levantando su brazo mutado, y cayó con un golpe tan potente que dejó un cráter en el suelo al fallar su objetivo. Logan rodó por el suelo para evitar el ataque, levantándose con agilidad mientras recargaba su arma, ya había gastado un cargador entero en Némesis y ni una herida ya que se curaba dos veces más rápido que por daño recibido.

La batalla se volvió un torbellino de acción.

Némesis continuaba avanzando con una tenacidad implacable. Su piel parecía absorber los impactos, las heridas cerrándose casi de inmediato. Para Rick y Daryl, quiénes observaban la pelea desde las ventanas, parecía como si un tanque se enfrentase a la potencia de tiro de una pistola. Ambas armas mortales pero una no tenía posibilidades contra el otro aunque rezaban para que se encontrase una forma.

Logan disparaba constantemente, apuntando a la cabeza y cualquier parte vulnerable, pero cada bala parecía ser absorbida por la brutal resistencia del monstruo.

-' Joder! Némesis, te amaba en los videojuegos y películas pero ahora mismo te odio con toda mi alma!!'- gritó en su mente mientras recargaba de nuevo si fúsil para luego saltar hacia el costado de Némesis para esquivar una patada para después incorporase y dispararle a la cabeza.

*BANG!**BANG!**BANG!**BANG!**BANG!**BANG!**BANG!**BANG!**BANG!**BANG!**BANG!**BANG!**BANG!**BANG!**BANG!**BANG!**BANG!**BANG!*

El sol comenzaba a ocultarse, sumiendo el claro en una penumbra que se hacía más densa con cada minuto que pasaba. Logan, con la respiración entrecortada y el sudor corriendo por su frente, luchaba para mantenerse en movimiento. Cada ráfaga de disparos se mezclaba con el sonido de los rugidos de Némesis y el retumbar de sus pasos pesados.

El combate se convirtió en una danza mortal, con Logan disparando sin cesar y esquivando a Némesis quien no paraba de destruir el antaño hermoso claro en esta hora que llevaban luchando.

A Logan solo le quedaban 1 cargador de su chaleco antibalas de las 7 iniciales, y usaba todas las fuerzas que tenía para esquivar los ataques de Némesis ya que eran mortales. Lo había comprobado una vez más cuando Némesis logró conectar un golpe bien dando que casi hace que perdiera la conciencia y como resultado tenía múltiples costillas rotas y seguramente un enorme hematoma en el pecho. Y la placa del chaleco ya tenía la forma del puño de Némesis, por suerte la placa misma era la razón de que Logan siguese vivo.