𝐒𝐫.𝐖𝐨𝐥𝐟𝐟 𝐮𝐧 𝐡𝐨𝐦𝐛𝐫𝐞 𝐚𝐥 𝐜𝐮𝐚𝐥 𝐚𝐦𝐚𝐫

Capitulo 7

Al tener esa semana libre antes de la próxima carrera wolff decidió quedarse en Mónaco ya que ahí vivía, para ser honestos la mayoría de pilotos vivía ahí.

Toto últimamente estaba más al tanto de las redes ya que esperaba que lewis subiera alguna foto con la joven, ya que no dejaba de pensar en ella, quería tomarla de la cintura nuevamente como ese día, pensaba muchos escenarios que quería vivir con la joven y unos más subidos de tono, se sentía enfermo por tener esos pensamientos pero  no podía evitarlos, simplemente ella despertaba todo en el.

—señor wolff hola, le llamamos para decirle que su pedido ya está, gusta que se lo llevemos a su casa?

—no es necesario en un momento pasó por el—
el mayor se sentía abrumado y que mejor que salir a caminar un poco y así aprovechar para ir por su comida

Wolff llegó al restaurante, tomó su pedido y ya estaba a punto de irse si no fuera porque alguien lo tomó del brazo.

—Señor wolff como está?—

—Sara hola que sorpresa, también cenando?—

—Así es señor pero ya he terminado solo que lo vi y aproveché para saludarlo, por momento se me olvida que usted vive aquí —

—No te preocupes, también verte seguido se me ha hecho extraño pero me alegra bastante que estés aquí, estás de vacaciones?—

—Oh no señor, vengo por trabajo bastante seguido, últimamente he pensado en comprarme un departamento, me recomienda alguna zona?—

—Enserio?, bueno hay zonas bastante buenas, pero vivir sola no me agrada mucho —a toto se le ocurrió una idea pero claramente pensaba seriamente si decirla —por qué no te quedas en mi casa?, bueno es bastante grande y tendrás mucho espacio, lo siento si incomode mmm solo se me ocurrió

—no hay porque disculparse señor wolff, gracias por ofrecerme su casa pero no quisiera incomodar o invadir su espacio

—tu invade todo lo que quieras—wolff cayó en cuenta que lo dijo en voz alta y enseguida se puso tan nervioso que ya no hablaba bien pero Sara solo soltó una risa amable—lo siento yo emm no quería decir eso

—jajajajaja no se preocupe señor wolff no hay razón para ponerse nervioso—Sara se acercó al mayor y este solo se quedaba quieto y claramente se dejaría a todo lo que pasara—está seguro que no le molesta tenerme en su casa?

—estoy segura Sara, en verdad me preocupa que estés sola aquí—ella era su perdición pero soportaría cualquier cosa con tal de verla todos los días

—le tomaré la palabra señor wolff pero no abusare, necesito que me cobre alquiler

—claro que no Sara, en verdad quiero que estés conmigo, bueno o sea me refiero que estés segura en un lugar—definitivamente era mejor que ya no hablara pensó wolff