Cuando Los Introvertidos Cruzan Caminos (oc x hitori gotoh)

El valor de la dignidad y Josuke vuelve al baloncesto

Durante los meses que siguieron a su cita con Hitori, Josuke había logrado cambiar su situación en la escuela. Uno de sus bullies más persistentes, un chico de pelo rubio y bronceado llamado Kai, seguía molestándolo a diario. Sin embargo, Josuke ya no era el mismo. Había ganado confianza y seguridad, en parte gracias al apoyo de Hitori y sus amigos de la Kessoku Band.

Un día, mientras Josuke estaba en clase, Kai se acercó a él con su habitual actitud intimidante. "Mira quién tenemos aquí, el chico que cree que puede tocar la guitarra como un profesional," dijo Kai, con una sonrisa burlona.

Josuke, sin embargo, no se dejó intimidar. Con una expresión decidida, respondió: "¿Y tú qué sabes de tocar la guitarra? Apuesto a que ni siquiera podrías sostener una nota."

Kai se sorprendió por la respuesta de Josuke y sintió que su control sobre él se desvanecía. "¿Qué dijiste?" respondió Kai, con tono amenazante.

Josuke, decidido a no dejarse amedrentar más, continuó: "Siempre te metes conmigo porque necesitas sentirte superior, pero todos sabemos que no eres más que un cobarde. ¿Qué te pasa? ¿Tienes miedo de que alguien descubra tus inseguridades?"

El rostro de Kai se puso rojo de ira. No estaba acostumbrado a que alguien se le enfrentara de esa manera. Sus puños se cerraron y, sin pensarlo dos veces, intentó golpear a Josuke. Sin embargo, Josuke había estado esperando esto. Con un movimiento rápido, bloqueó el golpe de Kai con su brazo, y le devolvió el golpe, impactando a Kai con el doble de fuerza. "Ojo por ojo, diente por diente kai..." dijo Josuke con firmeza.

El aula quedó en silencio mientras Kai se tambaleaba hacia atrás, sorprendido por la reacción de Josuke. Los demás estudiantes miraban atónitos, sin saber cómo reaccionar. La maestra, que había entrado en ese momento con la intención de hacer un importante anuncio, se detuvo en seco al ver la escena.

"¡Josuke! ¿Qué está pasando aquí?" exclamó la maestra, mientras los estudiantes murmuraban entre ellos.

Josuke, sin inmutarse, respondió: "Solo estaba defendiendo mi dignidad."

La maestra, claramente perturbada por el incidente, decidió tomar medidas y envió a Josuke al aislamiento temporal en la biblioteca. Josuke aceptó sin protestar, sintiéndose en parte aliviado por haber defendido sus principios.

Mientras tanto, Hitori, que había sido testigo del altercado, se quedó paralizada por un momento. Nunca había visto a Josuke reaccionar de esa manera. Su preocupación y admiración por él crecieron al instante. Durante el receso, Hitori no pudo concentrarse en sus clases y, tan pronto como tuvo la oportunidad, se dirigió a la biblioteca para buscar a Josuke.

Al encontrarlo sentado en una esquina, con una expresión pensativa en su rostro, se acercó a él con cautela. "Josuke-kun," dijo en voz baja, intentando no llamar la atención de la bibliotecaria. "¿Estás bien?"

Josuke levantó la vista y sonrió ligeramente al ver a Hitori. "Sí, estoy bien, Hitori-chan. No te preocupes."

Hitori se sentó a su lado, con una mirada de preocupación en sus ojos. "Vi lo que pasó en el aula. Fue... impresionante. Pero, ¿por qué decidiste enfrentarte a Kai de esa manera?"

Josuke suspiró, apoyando su espalda contra la silla. "No podía seguir dejándolo molestarme. Tenía que hacer algo, no solo por mí, sino por todos los que él ha estado intimidando. Y... bueno, también pensé en ti. No quiero que pienses que soy débil."

Hitori sonrió suavemente, sus ojos brillando con ternura. "Josuke-kun, nunca pensé que fueras débil. Me alegra que te hayas defendido, pero también me preocupo por ti. No quiero que te metas en problemas."