Capitulo 23 Crueldad

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Antes de que arrojaran a Susu al almacén, le quitaron los dos últimos talismanes, los clavos que reparan el alma e incluso la campana alrededor de su cintura.

  Este barco era el barco de Tantai Jin de regreso al Reino Zhou. No importa cuán sucio estuviera el lugar, no podía estar tan sucio en ningún lugar.

  Realmente hacía mucho frío.

  El viento frío de la noche de invierno sopla, como si atravesara huesos humanos, provocando un dolor punzante.

  Susu no podía quitarse la tela negra de los ojos, por lo que tuvo que moverse y agacharse detrás de unos barriles de madera para bloquear el viento frío.

  El barco ha zarpado.

  El almacén está lejos del nivel superior. Por el sonido de las olas del agua, se puede escuchar que esta noche hace mucho viento.

  Susu se estremeció y sintió que se estaba congelando.

  Tantai Jin la arrojó aquí y, por supuesto, no le importaba si ella vivía o moría.

  Después de confirmar que no había nadie cerca, Susu sonrió.

  "¡Fuego fuerte, quema!"

  El último trozo de talismán salió flotando de su cuello. Afortunadamente, nadie buscó aquí.

  Los alrededores se iluminaron y calentaron al instante. Un montón de fuego rodeó a Susu, voló a su alrededor varias veces y finalmente quemó las cuerdas que le ataban las manos y los pies.

  Susu exhaló un suspiro de alivio. Este fue el beneficio de estar más preparada al salir.

  Es mejor confiar en uno mismo que confiar en el cielo y la tierra.

  Acercó sus manos congeladas al fuego y pronto sus dedos se volvieron flexibles y suaves. Susu dejó escapar un suspiro, se levantó y se dio unas palmaditas en el barro del cuerpo.

  Naturalmente, es imposible para ella ir al Reino Zhou con Tantai Jin, pero sería bueno para ella ir a Huangyuan durante este tiempo.

  El estatus de la tercera señorita Ye le impide viajar muy lejos, por lo que ahora es una buena oportunidad.

  Susu planeó salir a investigar y encontrar una oportunidad para bajar del barco.

  Inesperadamente, caminó hacia la puerta y escuchó pasos afuera.

  Susu regresó rápidamente al lugar, se cubrió los ojos con un paño negro y se ató con una cuerda, pero no hizo más nudos.

  Movió los dedos y el fuego que la rodeaba se apagó.

  Alguien abrió la puerta y entró.

  Los pasos eran muy ligeros, mezclados con el olor del viento y la nieve afuera, y finalmente se detuvieron a su lado.

  Sonó un suspiro bajo.

  "¿Tienes hambre? Come algo".

  Susu escuchó que era la "señora".

  La mujer dejó la caja de comida y la entregó en los labios de Susu. Susu inició la conversación: "¿Quién eres?"

  La mujer dijo: "No se preocupe, no le haré daño por el momento. Todavía es útil para Su Alteza. No le dejaré morir antes de llegar al Reino Zhou".

  "¿Qué pasó en el Reino Zhou?"

  La mujer hizo una pausa: "No puedo decirte esto".

  Sopló un viento frío, la mujer recogió su piel de zorro y Susu sintió que la estaba mirando.

Zhang Yue Jin Ming. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora