Capítulo 5

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STELLA EVERLIGH

Cuando Matheo estacionó el auto,que por cierto no sabía de dónde lo había sacado pero lo que cuenta es que nos trajo hasta nuestro destino.Me asomé a la ventana y me quedé con la boca abierta. La supuesta cabaña parecía una mansión de campo. Tenía un aire rústico de cabaña y se veía muy moderno e inmenso desde afuera, en el patio principal había un jardín gigante con una piscina.A pesar del frío, había mucha gente nadando.

Matheo nos guio hacia la entrada, cruzamos un largo pasillo con gente bebiendo y riendo. Al entrar a la enorme sala dónde se encontraban todos, los colores temáticos del lugar era blanco y negro. La pista de baile era amplia y estaba llena de gente que bailaban al ritmo de la música de Britney Spears.

Avanzamos entre la multitud.

En una esquina pude visualizar a las tres realezas de Slytherins.

Me quedé observándolos por unos instantes.

Había un largo sofá de cuero negro en dónde Theodore estaba sentado, llevaba puesto un traje blanco, muy elegante. Su cabello estaba peinado hacia atrás a la perfección, revelando lo marcadas que eran sus facciones y su mandíbula; a su lado, estaban Blaise y Draco.

Ellos a diferencia de Theodore, tenían unos trajes oscuros, pero bastante llamativos.

Los tres parecían salidos de una revista de modelos masculinos, por la perfección y belleza de sus atuendos, sus rostros atractivos sin ninguna imperfección, La clase y elegancia que los tres transmitían era impecable.

La voz de Matheo me sacó de mis pensamientos.

-¡¿Qué quieren tomar?!-gritó Matheo por encima de la música.

-¡Yo quiero un destornillador!-respondió Pansy.

¿Escuché mal? O el volumen de la música me había dejado sorda¿Destornillador? ¿Qué era eso?

-¿Y tú , Stella?-me preguntó Matheo.

Me rasqué la nuca con disimulo, tratando de recordar algún trago, no tenía ni la más mínima idea cuál pedir, ya que no era el tipo de chica que solía ingerir bebidas alcohólicas, solo recordaba una en particular.

-¡Una piña colada!-respondí.

Matheo me estudió ,ceñudo, como si hubiera dicho algo ridículo y luego se acercó a la barra.Después de unos minutos Matheo apareció y nos entregó nuestros vasos.

Con el ceño fruncido, observé mi vaso por todos lados.

-Matheo, creo que te confundiste-le devolví el vaso-esto no fue lo que pedí.

-No me confundí -Matheo me volvió a dar el vaso-Yo pedí ese para ti.

-¿Qué? ¿Por qué?-pregunté sin entenderlo.

-No pretenderás tomar piña colada en una fiesta¿No?-enunció como si fuera demasiado obvio.

-¿Qué tiene de malo?-pregunté, incrédula.

-¿Cómo qué tiene de malo?,Es como que vayas a un restaurante de mariscos y pidas pollo a la plancha.

Bueno, tenía algo de razón.

-¿Y qué es esto exactamente?-olfatee el vaso.

-¡Es un daiquiri de fresa! ¡Es lo más suave para principiantes!

Matheo y Pansy se terminaron su bebida en un solo sorbo, ellos me animaron a que me tome el mío y por alguna extraña razón, no pude negarme.

De un solo sorbo, me tomé el líquido agridulce, Me bajó por la garganta como fuego, pero el sabor fue una combinación de extrañas sensaciones. De pronto, me sentí muy relajada. Quería reír, gritar,saltar, bailar,hacer locuras, quería hacer todo al mismo tiempo.

STELLA  [Theodore Nott]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora