Nasiens se despertó temprano aquella mañana, sintiendo una extraña energía recorriendo su cuerpo. Con los ojos aún medio cerrados, se deslizó fuera de la cama y caminó lentamente hacia el baño. Al encender la luz y mirar en el espejo, quedó boquiabierta.
Lo que vio la dejó en shock: su reflejo mostraba un cuerpo completamente diferente al que estaba acostumbrada. Su busto era más grande, sus caderas más anchas y su cintura notablemente más pequeña. Sus manos recorrieron su nueva figura, sintiendo la suavidad. Al alzar la vista nuevamente, notó que sus facciones eran más suaves y delicadas, su piel más tersa y luminosa.
"¿Qué está pasando?" pensó, recordando lo que Tioreh le había dicho una vez: "Si te enamoras de un chico, te convertirás en chica; si te enamoras de una chica, te convertirás en chico." Ahora, frente al espejo, la verdad se revelaba: se había enamorado de Percival. Había sentido ese amor crecer día a día, pero nunca imaginó que el cambio sería tan repentino y completo.
"Soy una chica... porque amo a Percival," murmuró, mientras una sonrisa tímida y un rubor aparecían en su rostro. Aunque el cambio era impactante, una parte de ella se sentía extrañamente en paz. Finalmente, su cuerpo reflejaba lo que su corazón había sentido durante tanto tiempo.
Decidió buscar algo de ropa pues antes de regresar del bosque del rey hada su hermana menor "Tioreh" le avía dado unos conjuntos de chicas, pues su hermana sospechaba que ella se combertiria en una y tubo la razón. Busco entre todo lo menos revelador posible y encontró una vestido blanco que le llegaba hasta las rodillas era muy hermoso. Se colocó su sombrero pero no encontró su bata de herbolaria.
Así era el vestido
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Salió de su habitación y se dirigio al comedor, pero nadie estaba ay, se preguntó donde se encontraban sus amigos. Estaba un poco asustada ya que el único que sabia que no tenía genero era percival, salió de ay y se encontró con el rey y la reina de liones.
—sumajesta meliodas, sumajesta Elizabeth buenos días—Dijo mientras daba una pequeña inclinacion.
—Nasiens eres tu? —Pregunto Elizabeth.
Nasiens se digno a contarles sobre su género a los reyes.
—Ya veo King me contó sobre que algunas hadas nacen sin genero— Le dijo Meliodas mientras hacía su cara chibi.
—si Diana también me contó sobre eso, tranquila Nasiens todos te aceptamos sea como seas.
—Muchos gracias, pero saben donde estan los chicos?.—pregunto la hada.
—si te refieres a Percival, Donny y Anne ellos se encuentran en el jardín entrenado. Le respondió el rey.
—Okay hasta luego—Salió volando como el viento miestras les decía adiós con las manos a los reyes.
Los dos reyes solo la veian volar como un como el viento mientras se miraban y reían, nasiens era muy lindo y ahora lo era más dijeron los dos.
—pobre King de seguro y se roban a su hija—dijo meliodas mientras toqueteaba a su esposa.
—Si se volvió aun más hermosa y es como la versión femenina de King. Le respondió su esposa.
—tienes razón cariño, pero ya vámonos tengo hambre.
Los dos reyes se fueron hablando de cosas.
nasiens llego en donde estaban sus amigos.
Nasiens caminaba por los pasillos del castillo, su corazón latiendo con fuerza mientras se dirigía al lugar donde sus amigos Percival, Donny y Anne estaban. Con cada paso, se preguntaba cómo reaccionarían al verla así. Al llegar al jardin, respiró hondo y fue.
Percival, Donny y Anne levantaron la vista al mismo tiempo, y sus expresiones pasaron de sorpresa a asombro. Antes de que pudieran decir algo, Nasiens levantó una mano para pedirles que la escucharan primero.
—Chicos, necesito explicarles algo,— comenzó, su voz firme pero suave y explico sobre su género.
Ya percival sabía de esto, pero Donny y Anne no.
Hubo un momento de silencio, seguido por un suspiro de alivio de Anne. "Bueno, eso tiene sentido.“Se dijo ella en su mente pues ya no notaba una mancha de mentira o secreto en nasiens —Gracias por contárnoslo, Nasiens.—
Donny asintió, sonriendo ampliamente. —Sí, y para ser honesto, te ves genial.
Percival, se acercó y le puso una mano en el hombro. —Siempre serás nuestra amiga, no importa cómo te veas. Eres Nasiens, y eso es lo que importa—
Con esa aceptación, Nasiens sintió que una gran carga se levantaba de sus hombros. Los cuatro amigos pasaron el día explorando la ciudad del Reino de Liones, disfrutando de las vistas, la comida y la compañía mutua. Se reían y bromeaban, sintiéndose más unidos que nunca. Sin mencionar que Percival con un arco y flecha arruinó el cabello de Donny.
Al atardecer, mientras paseaban por los jardines del castillo, Percival y Nasiens se quedaron un poco atrás del grupo. El ambiente era tranquilo, y el sol poniente bañaba el cielo de tonos cálidos. Percival se detuvo y miró a Nasiens con una sonrisa suave.
—Sabes, Nasiens,— dijo, su voz llena de sinceridad, —ahora eres mucho más linda que antes. No me malinterpretes, siempre has sido hermosa, pero ahora... hay algo especial en ti.—
Nasiens sintió que su corazón latía aún más rápido, y un rubor cálido se extendió por sus mejillas. —Gracias, Percival,— respondió, sus ojos brillando con gratitud y emoción.
Los dos amigos compartieron un momento de conexión profunda, un entendimiento silencioso que no necesitaba más palabras. Para Nasiens, ese día marcó no solo un cambio en su apariencia, sino también un fortalecimiento en los lazos con aquellos a quienes más quería.
Holaaa, perdonen la demora JEJEJE, había esta ocupa, espero y no tener faltas ortográficas en este cap ya que lo escribí muy rápido,
Creo que le cambiare el nombre a él fanfic ya que creo que esta muy largo.
