Capitulo 03

32 7 0
                                    


Justo como Izuku lo había predicho, el alfa apareció a la hora acordada sin nadie, Shinsou estaba muy cerca de ellos vigilando el parque sin ser visto ni oído, tampoco el por su parte le apetecía saber que tenían que hablar aquellos dos

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Justo como Izuku lo había predicho, el alfa apareció a la hora acordada sin nadie, Shinsou estaba muy cerca de ellos vigilando el parque sin ser visto ni oído, tampoco el por su parte le apetecía saber que tenían que hablar aquellos dos.

Nunca preguntar, ni cuestionar a tu líder, esa era la primera regla que Shinsou tuvo que aprender cuando aceptó unirse a la organización.

La noche era hermosa aquella fecha, sin una estrella que perjudicara la tranquilidad de la oscuridad que contrastaba con la intensa luna llena que era la única fuente de luz principal en aquel viejo parque, cuando Katsuki llegó estaba solo, vestía casualmente con pantalones negros y camiseta blanca, nada fuera de lo básico, pues no era como que tuviera mente para arreglarse sabiendo con qué tipo de problema estaba por lidiar.

Aunque su alfa no lo viera de esa manera, estaba intranquilo, y el cenizo podía sentirlo vibrar y retorcerse bajo su piel, era una sensación algo nueva para él, pues nunca antes había tenido tan presente su parte animal como ahora desde que había visto a su destinado.

Un omega misterioso que resultó ser la persona de su infancia a la que por mucho tiempo había molestado y rebajado por no tener un kosei.

Y que ahora fuera de serlo, era una completa amenaza tanto para el, como para la sociedad que tanto le había costado proteger y que ahora lo veía a una distancia prudente, vestido elegante y agraciadamente con costosas ropas que destacaban la masculinidad de su figura y lo delicado de su casta y con una sonrisa amable, que de eso no tenía nada.

Katsuki podía saberlo con solo verlo, que ese gesto no era más que una expresión disfrazada de la satisfacción por haber logrado que el cenizo viniese a él.

Pero mierda, como no hacerlo, intento dormir el día anterior después de dar el reporte al llegar a su departamento y lo único que podía imaginarse al cerrar sus ojos eran aquellos orbes verdes que ahora no reflejaban miedo sino una enigmática fiereza que lo atraía a saber qué mierda había pasado durante ese tiempo que estuvo desaparecido.

La curiosidad y la necesidad de su alfa por volver a verlo lo hizo saltar de la cama al verla hora, vestirse con lo primero que encontró y así fue hasta ese parque.

Todo estaba en completo silencio, solo existía entre ellos, una pequeña tensión que empezó a formarse cuando se vieron, y es que poner frente a frente a un alfa de nivel gamma con su omega destinado, era algo que muy, muy poco sucedía.

—Kacchan de verdad viniste. —empezó el.

—No te emociones, no vine porque me lo pediste, vine por las vidas de las personas que pusiste en riesgo por tu estúpido capricho. —mintió, si había ido por el omega.

Izuku solo pudo sonreír divertido, aún tenía esa pequeña costumbre de girar los ojos cuando mentía, el peliverde lo sabía no por gusto, aún recuerda cómo mintió para salvarse pellejo y dejarlo solo con aquellos que le dieron su última paliza.

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Aug 03 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

REENCUENTRO (BKDK) - OMEGAVERSEDonde viven las historias. Descúbrelo ahora