┈ Mi Esposo es una planta

54. Un amor repentino

Antes del amanecer, Ji Yang se despertó de un sueño inquieto y vio a Lin Mo transformado en una serpiente, enrollada en el borde del montón de hierba donde dormía. La escama brillante y negra de la serpiente reflejaba una luz fría y penetrante. Ji Yang no quería molestar a Lin Mo, así que no hizo ningún ruido y miró hacia la entrada de la cueva, perdido en la oscuridad de las sombras de los árboles.

Cuando el cielo se iluminó ligeramente, Ji Yang se levantó. Lin Mo abrió los ojos instantáneamente, miró a Ji Yang con la cabeza inclinada, y sus ojos de bestia eran profundos como un tinte negro pulido.

Ji Yang no pudo evitar tragar saliva, y sonrió ligeramente: "Buenos días".

Lin Mo siseó y escupió la letra de la serpiente¹.

"Uh, voy a ir a lavarme", dijo Ji Yang mientras se levantaba, saliendo sigilosamente del nido de serpientes, solo hasta que estuvo lejos sintió alivio, sin saber por qué, siempre se sentía incómodo frente a Lin Mo, como si no fuera tan relajado como antes.

Ji Yang desayunó un poco de la carne asada que sobró de la noche anterior, echó un vistazo a Lin Mo que estaba disfrutando del sol en la entrada de la cueva. Sintió que sería una mala idea molestarlo ahora, pero aun así se acercó con valentía.

"Eh, voy a ir a buscar a Dongfang Qiu, gracias por cuidarme ayer", dijo Ji Yang sinceramente, esperando en su corazón que Lin Mo tuviera un cambio de corazón y lo ayudará de nuevo.

Lin Mo miró a Ji Yang, bajó los párpados, como si no le prestara atención, pero envolvió la pierna de Ji Yang con su cola de serpiente.

"¿Qué significa esto?" Ji Yang frunció el ceño, sin estar seguro del significado de las acciones de Lin Mo.

"Sss~" Los ojos negros de Lin Mo destellaron con una chispa de resentimiento. Se transformó en su forma humana, agarró fuertemente a Ji Yang y lo sentó, diciendo: "No te vayas, no vayas a buscar a ese hombre planta, siempre te mete en peligro, no vale la pena que lo quieras".

"¿Hmm?" Ji Yang se sorprendió al principio, y cuanto más escuchaba, más se fruncía el ceño. Su tono hacia Lin Mo también se volvió más frío y dijo con desdén: "Creo que esto no es asunto tuyo".

Ji Yang terminó de hablar, ya no esperaba que Lin Mo lo ayudará. Quería levantarse e irse, pero Lin Mo lo abrazó con fuerza.

Ji Yang se sorprendió, puso sus manos en el pecho de ambos, que estaban demasiado cerca, y sintió una piel ligeramente fría, lo que lo hizo sentir incómodo. De repente, recordó el prejuicio de los hombres bestia hacia las serpientes espirituales y a Xiaoyou, quien fue poseído por la fuerza por Lin Mo.

Las siguientes palabras de Lin Mo convirtieron la inquietud de Ji Yang en realidad.

"No te vayas, Ji Yang, ¿por qué no vivimos bien aquí? Aquí no hay nadie más, nadie vendrá a hacerte daño, te protegeré bien. Si no te gusta aquí, podemos buscar otro lugar, también podemos ir cerca de otras tribus de humanos bestia". Lin Mo expresó su corazón de manera tan abierta por primera vez, sintiéndose un poco nervioso, mirando fijamente a Ji Yang, sin querer perder ninguna de sus expresiones.

Ji Yang se quedó completamente paralizado, mirando a Lin Mo con shock, incluso olvidó empujarlo. Aunque ya había aceptado a Dongfang Qiu, a sus ojos otros hombres son del mismo género.

"Ji Yang". Lin Mo no obtuvo respuesta, por lo que apretó los brazos con ansiedad y se acercó a los labios de Ji Yang, como si quisiera besarlo.

Ji Yang finalmente volvió en sí, empujó con fuerza a Lin Mo y gritó: "¡Qué estás diciendo!". Recuperándose del shock, Ji Yang suavizó su tono un poco, "Fingiré que no escuché lo que dijiste hoy, no lo digas más. Me voy".