Talentos Ocultos

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Holas~

Veo con alivio que la re-subida no ha sido borrada aún, supongo que tendremos que ver si los caps picantes sobreviven a la censura.

Mientras tanto, tendremos hamadacest cuanto nos lo permita la ley bebés

Nos vemos abajo, mis Grandes Héroes.

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Talentos Ocultos

***

-¡No, no y por supuesto que no!- repitió su mantra como por, al menos, duodécima vez en media hora, sin inmutarse ante las miradas de los cinco mayores y el robot sobre él. Miradas que iban desde el desconcierto total hasta el aburrimiento absoluto.

Todos estaban de acuerdo salvo por él, habían dado el sí prácticamente en el mismo instante en que Tadashi había propuesto entrar al grupo. Y eran cosas como esas las que, algunas veces, le obligaban preguntarse si es que sus amigos habían chupado los barrotes con plomo de sus cunas cuando eran bebés.

Tadashi se acercó un paso hacía él, con aquella expresión en sus ojos que pretendía hacerle entender razones, pero el chico retrocedió, fulminándole con la mirada más furiosa que le hubiera visto alguna vez, incluso más que la que le dio hace unos minutos. Hasta cierto punto, incluso parecía indignado, lo que desconcertaba ampliamente al mayor.

-Hiro...

-No, Tadashi- le cortó con brusquedad, con un tono firme y molesto acompañado de un gesto veloz de su mano, como si desechara la idea desde el comienzo. Lo que, en realidad, era lo que había hecho-. Ya perdí a mi hermano una vez, no haré algo que te ponga en peligro de nuevo, y tampoco pienso permitir que lo hagas tú.

Tadashi parpadeó repetidamente, cambiando su expresión de extrañeza ante la actitud de su hermano por una de sorpresa. Acto seguido, reprimió el deseo de soltar un pesado suspiro al comprender el secreto detrás de la reacción de su hermano. Así que era eso, miedo.

No pudo evitar volver a llenarse de culpabilidad al notar hasta que nivel Hiro había sido marcado por su causa, estando dispuesto incluso a alejarlo de él.

-Creo que es una decisión mía, no tuya- señaló, cruzando sus brazos sobre su pecho, y Hiro supo que sería casi imposible hacerle cambiar de opinión.

-Hermano, déjalo entrar ya- intervino Fred, tan relajado como siempre, y el menor le dedicó una mirada tan llena de hostilidad, que literalmente soltó un pequeño gritito, antes de ocultarse detrás de una aburrida Gogo.

-Ya somos suficientes en el equipo- soltó, utilizando cualquier cosa que se le cruzara por la mente para evitar que los demás avalaran aquella locura.

-Busca una mejor excusa- se burló la coreana, para luego inflar y explotar un chicle con expresión indiferente. Apartó a Fred de ella con un fuerte empujón.

Hiro gruñó en su fuero interno.

-Me distraerá en las misiones- intentó.

-El realizar actividades junto a Tadashi por tiempo prolongado ayudará a obtener resultados mayormente beneficiosos en la terapia de Hiro- soltó Baymax, hablando por primera vez desde que aquella extraña situación había comenzado. Tadashi alzó una ceja, antes de dirigir una mirada inquisidora al ruborizado chico.

-¿Terapia?

-Hasta tú me traicionas, malvavisco gigante- gruñó, ignorando la pregunta de su hermano, horrorizándose sólo ante la idea de tener que contestarla. En lugar de ello, rebuscó en su mente, en lo más profundo de sus pensamientos, alguna excusa lo suficientemente válida para dejar a Tadashi lejos de sus misiones de forma definitiva. Y, cuando probó otro enfoque de la situación y la respuesta se reveló ante sus ojos, estuvo a punto de darse un golpe a sí mismo ante lo sencilla y obvia que era. Sonrió con malicia en dirección al mayor, triunfante, y Tadashi estrechó su mirada, receloso-. ¿Y qué va a hacer, supuestamente? No tiene ninguna habilidad, después de todo.

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