𝐓𝐇𝐄 𝐅𝐎𝐑𝐂𝐄 𝐎𝐅 𝐋𝐎𝐕𝐄 || 𝐀𝐍𝐀𝐊𝐈𝐍 𝐒𝐊𝐘𝐖𝐀𝐋𝐊𝐄𝐑 𝐅𝐀𝐍𝐅𝐈𝐂

003. 𝘌𝘓𝘓𝘈

CAPÍTULO 003. ELLA

Ya han pasado más de 8 meses desde que me volví en una pirata y me uní a está tripulación. Mi embarazo avanzó de manera sana y tranquila, casi siempre Hondo no me dejaba participar en las misiones de alto riesgo, donde según él, me podría lastimar. Pero como soy una mujer fuerte, guerrera y necia, aún así iba, aunque me terminaban rescatando o él o Miller o hasta por lo mucho Lava, y teminaba con rasguños, en los brazos y en las piernas, pero no pasaba de mayores.

─ Te dijeron que te quedarás en Florrum ─dijo Miller mientras me ayudaba a levantarme.

─ En Florrum me aburriria ─dije con dificultad mientras comenzaba a correr a la par de él.

─ Pero estarías a salvo y tranquila, no corriendo por tu vida en Tatooine ─me miró.─ Estás embarazada y que tengas poderes, no significa que no saldrás herida de aquí.

Llegamos hasta la nave y me ayudó a subir en ella, y hasta estar todos adentró, Hondo encendió la nave y nos marchamos de aquel planeta.

Yo me recargue con pesadez en una de las paredes de la nave y respire hondo. Algo no está bien.

─ ¿Dalina?, ¿qué te pasa?, ¿estás bien?

Dijo el chico mientras se acercaba a mí, iba a responderle, pero el sonido de un pisoteo de charco hizo que ambos miraramos al suelo, dándome cuenta que el líquido del charco se chorreaba de mí.

─ Creó que alguien ya va a nacer ─dijo con una sonrisa Lava mientras se acercaba a nosotros y mirarme.

En eso comence a tener dolores punzantes en mi vientre y la sensación de querer atravesar mi entrepierna. Esto realmente duele mucho.

Tomé con rapidez la mano de Miller y de mi otro lado atrape a Lava de la mano, e hice a que me ayudarán a mantenerme de pie.

─ Vamos Miller, ayúdame a llevarla a la habitación.

Dicho eso, ambos adolescentes me tomaron de la cintura, ayudandome a caminar, hasta que llegamos a una habitación que no reconocí, pero que tenía buena iluminación. Y me acostaron en una cama.

─ ¡¿GARRAT?!, ¡¿dónde está Garrat?! ─dijo Lava buscandola con la mirada.

─ ¡Aquí estoy!, aquí estoy ─colocó una sábana grande, pero ligera sobre mí.─ Levanta un poco las piernas y la cadera.

Obedeci a lo que me dijo, y se deshizo de mi pantalón, junto a mis zapatos.

Mantuve mis piernas abierta y comence a pujar, Garrat dejó las cosas en el piso y se adentró en la sabana, para ayudarme con el parto.

Grite, empuje, me aferre, lloré e intenté no hacer mucha fuerza para no lastimar a mi bebé, a Lava y a Miller, quien me miraba un poco rojo y sufriendo por mi agarré, por el otro lado, Lava estaba tranquila, ayudandome a respirar y a secarme el sudor.

─ Ya no puedo ─dijo Miller retorciendose un poco.

─ Yo tampoco.

Está vez fui yo y puje, sintiéndome por fin liberada, por lo que a los pocos segundos, escuche el llanto de mi bebé, haciendome sonreír.

─ ¿C-cómo está mi bebé? ─dije con la voz entrecortada.─ ¿c-cómo está él?

─ Querrás decir ella ─salió Garrat de la sabana con una sonrisa.─ Es una hermosa niña ─y me la entregó.

La tome en mis brazos y sonreí con tanta emoción, pero se desvaneció cuando escuché un golpe en secó del lado de Miller.

─ Ay ¡Miller! ─dijo Lava soltando una carcajeada y se dirigió al lugar de su amigo.