CAPÍTULO 8

282 39 110
                                    

CAPÍTULO 8

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

CAPÍTULO 8

—Han, haz algo por alguna vez y pon música.

Frente a mis ojos hay una luz cegadora proveniente de lo que parece ser un fluorescente y aquello es lo único que puedo ver con claridad. Todo está borroso, incluso las siluetas que se mueven a mi alrededor.

Me toma un momento darme cuenta de que estoy recostada sobre el suelo y que las siluetas que me rodean son hombres.

—¿Música? —Pregunta el recién nombrado con voz temblorosa.

—Encima de la mesa está el casete que te mostré temprano —suelta con voz melosa, como si fuera lo más obvio del mundo.

Hay un momento de silencio en el que intento parpadear y abrir más mis ojos, pero me encuentro demasiado aturdida. Luego, escucho un chasquido que inicialmente se me hace difícil de reconocer, pero cuando comienza a sonar música logro entender que se trata de una radio.

—¿Y qué se supone que haremos? —Pregunta un tercero, con un dejo de aburrimiento en su voz.

—Ha muerto, así que deberíamos deshacernos del cuerpo... —aquella voz me suena tan conocida que una alarma se enciende dentro de mi cabeza.

—¡Qué buena idea, Kim! —Interrumpe el primero que había hablado antes y que parece ser el líder—. Sabía que podrías ser útil alguna vez...  —Hace una pausa y luego suelta un suspiro—. Allí hay una sierra, córtale las extremidades.

—¡¿Qué?! —Exclama Han asustado.

Nadie le responde, solo escucho pasos y veo a las sobras moverse nuevamente a mi alrededor. Supongo que es Kim quien toma la sierra que le indicó el líder y quien se acerca a paso lento e inseguro hacia mí.

Comienza la siguiente canción y el altavoz de la radio suena con un ritmo conocido que resuena en lo más profundo de mi ser. Mi corazón se detiene un instante y aquello es suficiente para reanimar mi cuerpo, acelerando mi pulso y obligándome a abrir los ojos como platos. Frente a mí se encuentra el líder, cuyo rostro creo haber visto antes, pero no recuerdo jamás habérmelo encontrado en el club y sé que no es alguien a quien conozca de otro lado.

Su expresión se distorsiona, haciéndolo lucir furioso, tanto que me da miedo y quiero encogerme en mi lugar o salir escapando, pero el cuerpo no me responde. Exclama unas cosas que me cuesta entender, luego me golpea el rostro con una patada y finalmente se arrodilla junto a mi agonizante cuerpo.

—No te mueres nunca, ¿no? —Susurra entre dientes mientras rodea mi cuello con sus manos grandes.

Las lágrimas caen por los costados de mi rostro, sé que lloro por mi vida y que llevo tanto rato rogando por no perderla que las palabras han perdido el completo sentido para mí, pero de igual manera continúo haciéndolo. Incluso cuando el aire ya no pasa por mis pulmones y dejo de respirar.

REVENGE: THE LUST  ━ J.JK〚+21〛Donde viven las historias. Descúbrelo ahora