Mí momento más erótico| kookMin

Capítulo VIII

Al llegar a la habitación del mayor, caminó hasta la cama dejando caer su cuerpo posicionándose sobre él con cuidado de no aplastarlo. Sus lenguas se enredaron la una con la otra mientras se movía lentamente en su interior.

— Ahhh…

— No se si debería maldecir a ese imbécil hombre por dejarte ir, o agradecer el que lo haya hecho — suspiró — De lo contrario no estarias gimiendo debajo de mi en estos momentos.

— Increíbles descarado — sonrió Jimin con un fuerte sonrojó en sus mejillas.

— Así te gusta no — jadeó Jungkook.

— Tienes razón, me encanta — susurro.

Ll vando Ian de sus manos al borde de la sudadera del mayor, Jungkook la subió lentamente.

— Abre — ordenó y Jimin abrió su boca tomando esta— Eso es bebé, déjame probar mi postre nuevamente — murmuró bajando a su pecho tomándose sus pezones.

El cuerpo de Jimin se arqueo sobre ella cama mientras se aferraba a sus sábanas y gemía a lo alto. Esa habilidosa lengua sabía lo que hacía por lo que cerrando sus ojos, se entregó a él.

— Ah~hh…s-se siente muy bien — suspiró.

— Carajo, mira lo erectos que están — tiró de uno de sus pezones entre sus dientes — Deliciosos…

— A~hh... — Jimin llevó sus manos al rostro del menor y lo acercó a su boca — Quiero probarte también, por favor déjame probarte — suplicó chupando su labio inferior.

Jungkook sonrió y se alejó de él. Jimin se sentó en la cama una vez salió de su interior, lo vio quedar de pie a un lado de la cama y gateó hasta él.

— Soy todo tuyo amor, puedes probar cuando quieras — abrió sus brazos.

Jimin sonrió y llevó sus manos al abdomen del contrario acariciando hasta sus pectorales, Jungkook suspiró cuando sus labios hicieron contacto con su piel. Deslizando su rosada lengua, Jimin lamió uno de sus pezones dejando un pequeño beso en cada uno mientras bajaba hasta su ombligo.

— Ahhh — suspiró Jungkook satisfecho con sus caricias.

Su pene estaba erecto apuntando en su dirección, Jimin gimió de solo verlo en todo su esplendor. Lamiendo sus labios, se acercó tomándolo con ambas manos, su lengua acarició la punta y Jungkook se estremeció.

— ¿Te gusta lo que ves?

— Es tan grande…— miró los ojos del menor volviendo a pasar su lengua por la punta de su polla.

— Ahhh… y tú boquita tan pequeña, podrás con esto Park

— Ya lo hice una vez no— sonrió llevándolo por completo a su boca.

El cuerpo de Jungkook se estremeció y comenzó a sumergirse en un placer inimaginable. El mejor de toda su jodida vida. Jimin comenzó a mamarlo lentamente moviendo su cabeza al compás. Luego lo sacó y deslizó su rosada lengua por toda su extensión hasta sus bolas para luego volver a tomarlo en su boca.

— A~hhh mierda eres tan bueno en esto, joder — gimió Jungkook echando su cabeza hacia atrás.

Ese rubio de allí era el chico de sus sueños chupándole la polla como nadie antes lo había hecho. Si, estaba en el lugar correcto.

— ¿Cómo se siente? ¿La chupo bien?—  se lo sacó de la boca para poder hablar— Dime cómo lo hago — beso la punta.

Jungkook estaba tan extasiado por su deliciosa mamada que no pudo ni hablar, solo asintió con la cabeza y volvió a meter su pene en la boca del rubio. Comenzó a mover sus caderas contra él sin piedad,  para que se la chupara más fuerte. Pudo sentir su hermosa y rojiza lengua masajear cada punto débil de su gigantesco pene.