- Y, por primera vez en mucho tiempo, ¡Tenemos un nuevo ganador, un nuevo primer lugar, felicidades a Na Jaemin! ¡Un fuerte aplauso para él!
Jeno estaba furioso, enojado y todas las palabras que se le asemeje, caminó con Nimbus fuera del hipódromo, el segundo lugar era definitivamente de las peores cosas que le podían pasar en su vida, y perdió contra la persona con la que debía fingir estar de mil amores por culpa de su madre.
- Maldita sea mil y un quinientas veces.
- No son palabras de un príncipe, Su Alteza - Con bastante socarronería, y sin esperar una reacción del príncipe, Jaemin se atrevió a acercarse a Jeno.
Grave error.
- Ni creas que me importa que seas miembro de la realeza - A Jaemin le empezaba a faltar el aire, los fuertes brazos de Jeno aprisionaron su cuello de un momento a otro - Desaparece de mi vista hasta mañana que no me queda de otra que convivir contigo, y que sepas que quiero la revancha, a mí NADIE me gana - Lo soltó y, luego de toser unas cuantas veces, dirigió su mirada hacia él, sonriendo.
- Pues yo lo hice, Lee, vive con eso - Jeno no tenía más paciencia, pero no iba a matarlo, no ahora, así que le escupió y se alejó de allí.
Llegando al castillo, donde le esperaba su madre en la entrada, con una mirada de desapruebo, Jeno se dio cuenta de que necesitaba practicar más, iba a terminar de perder los estribos si este nuevo principito volvía a humillarlo, era algo inaceptable para él y su enorme ego.
- ¿Jeno? - Yoonmi, su madre, chasqueaba los dedos en el rostro de su hijo, sacándolo de su trance.
- No tengo ganas de hablar, mamá - Dijo seco, esquivándola y adentrándose en el castillo luego de que abrieran las puertas para él.
- Pues tienes que hacerlo, mañana debes estar en el comedor a las 8, los Na vendrán a desayunar y estarán gran parte del día aquí, debes ser un joven educado y cortés, con una conducta digna de un príncip-
- Si, si, a la mierda todo eso, me voy a bañar - Besó la frente de su madre, quien relajó el rostro y suspiró profundamente.
- Jeno, sólo quiero que-
- Que sea y de lo mejor de mí, lo sé y lo entiendo, ¿sí? No estoy de humor, te prometo que haré las cosas bien mañana, adiós - Subió las escaleras con la mente en otro lado y Yoonmi volvió a respirar profundamente.
- Espero esto sólo sea una etapa.
Jeno sumergió su vigoroso cuerpo en la enorme tina, esperando que el agua se llevase lo desgraciado que se sentía en ese momento, en dos años que llevaba participando profesionalmente en las carreras de equitación, jamás había perdido, siempre había sido el mejor, siempre había sido él.
Y ahora, de la nada, debía dejar de ser él, y empezar a ser el príncipe Lee Jeno, cada vez tenía menos tiempo para montar a caballo o practicar arquería, ahora debía conocer otras familias reales, firmar documentos, hacer trabajo comunitario, dar entrevistas y trabajar con sus padres en los asuntos del pueblo porque "Pronto este sería su pueblo"
Muy pronto, él ya no sería el príncipe Jeno, sería el Rey Jeno, él es el heredero.
Pero apenas cumplía 18 años.
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El canto de los pajarillos, las tenues luces del amanecer, el hermoso castillo saliendo a la luz gracias al sol, brindaban un paisaje de cuento de hadas, en el que el príncipe Jeno despertaba de un dulce sueño reparador, se estiró suavemente en su cama, abrió los ojos y exclamó:
- Mierda, me quedé dormido.
Quitó las sábanas rapidamente y escuchó los pasos de alguna de las sirvientas correr a su habitación.
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Honor - Nomin
Teen FictionJeno, además de ser el príncipe de Inglaterra, es un excelente jinete y apasionado por la equitación, deporte que utiliza para escapar de su vida llena de reglas y límites que disfruta romper de vez en cuando, acostumbrado a ser el número uno en las...