Londres. Sábado, 21 de Febrero, por la tarde

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Había pasado una mala noche, y nos pasamos toda la tarde con Mary, quien nos contaba todas las leyendas que había podido escuchar sobre Hela. Nos fuimos a dormir temprano ya que yo estaba cansada, pero, para mi sorpresa no pude pegar ni un ojo en toda la noche. Etihw estaba durmiendo y no parecía que se fuera a despertar. Salí del cuarto y bajé las escaleras de caracol para ir hacia una sencilla cocina donde habíamos preparado el almuerzo. Era una noche fría y la niebla se colaba por debajo de la puerta principal y por una ventana que se encontraba abierta en la cocina. Me serví un vaso de leche y me quedé de pie observando las sombras de los muebles de aquella habitación pensando que algo no encajaba...

La humedad del ambiente volvió a dificultarme la respiración. Tosí gravemente y alguien me agarró con sus dos manos del cuello. Apretaba muy fuerte y no me dejaba respirar. Pataleaba sin cesar teniendo la sensación de que no era una persona quien me estrangulaba. Afortunadamente Etihw bajó las escaleras corriendo y mi agresor escapó llevándose toda la niebla de una pasada. Caí de rodillas y Etihw me ayudó a levantarme. Subimos las escaleras y llamamos al cuarto de Mary.

-¿Pero, qué ha ocurrido?

-La han atacado -dijo Etihw-.

-¡¿Quién?! -contesto Mary alterada-.

-No lo sé... Estaba en la cocina bebiendo un vaso de leche cuando algo me agarró del cuello. No no podía ser una persona porque por más codazos que daba, siempre quedaban en el aire.

-Ha tenido que ser una sombra enviada por Eldern. Queda poco para el día de tu cumpleaños, y él quiere que se cumpla la profecía.

-Tenemos que enfrentarnos a él, -dije con voz firme-Es hora de acabar con mis miedos y afrontar mi destino.

-De acuerdo, invoquemos a los espectros. Él se dará cuenta de dónde estamos y no dudará en venir para atormentarte y que te quites la vida. Nora, por favor, tienes que pensar en tus pesadillas. Recuérdalas todas. Viaja a tu niñez, y trae de vuelta a tus monstruos.

Un soplo de aire frío recorrió mi espina vertebral.Las luces de la casa empezaron a parpadear hasta fundirse. Los cristales de las ventanas y espejos de la pequeña habitación estallaron en pedazos. Otra vez mis miedos volvían a aflorar. Sentía en mi piel los gritos de las almas que me rodeaban buscando ayuda para escapar de este mundo. Pero esta vez no retrocedí. Invoqué las almas de los doce guardianes de Hela y junto a los once discípulos de Erlend apareció él. Invoqué varios hechizos para hacer desaparecer a las sombras pero Erlend mantenía la oscuridad completa. Un dolor punzante atravesó mi abdomen. Caí al suelo de rodillas y cuando Erlend se acercó a mí para sacarme el cuchillo,me levanté como si no me hubiera pasado nada aunque en el suelo había un gran charco de sangre. Saqué el cuchillo y se lo clavé directo en el corazón. Ahora era él el que estaba de rodillas.

Lo dejé tirado allí mismo y con las manos sobre mi barriga, comencé a andar por esa dimensión de oscuridad buscando a Etihw y a Mary. Las voces de fantasmas me atormentaban y otra vez volvía a estar en aquel pasillo con una luz al final tan tranquilizadora... mis pies empezaron a moverse en esa dirección.Quería dar la vuelta pero solo podía llorar. ¿Dónde se encontraban? ¿No escuchaban mis gritos? Quizás preferían dejar me sola y no tener tantos problemas. Llorando, sólo podía cruzar aquel portal de luz, y esta vez no estaba Etihw para impedírmelo. Avancé unos pasos más. Me di la vuelta y observé con la ayuda de la luz el cuerpo sin vida del Sr. Black. "La codicia a veces nos ciega y nonos permite ver cuál es nuestro destino... que siempre es la muerte." pensé. Crucé la luz y noté cómo mi cuerpo estallaba en mil trozos. Ya no sentía ningún tipo de dolor. Cerré los ojos y ante mí en un río de sangre, pude ver la manzana dorada pudrirse,los corazones destrozados de Mary y Etihw por mi funeral, y el reflejo de una mujer, mitad humana, bellísima, con los ojos grises y el pelo oscuro, y, la otra mitad, putrefacta y en descomposición.

FIN

LA HIJA DE LA MUERTEDonde viven las historias. Descúbrelo ahora