La tarde es cálida, la primavera esta llegando y con ella todo el verde, el olor de las flores y las abejas. Enzo pasa la tarde con su hermanita Olivia en su casa.Su mamá es dueña de una galeria de arte y su papá arquitecto de obras, eso los mantenía ocupados. No tenian tiempo para estar mucho con Olivia, y Enzo, como hermano mayor, ocupó ese lugar. Son tan parecidos que incluso la gente pensaba que era su hija, a pesar de sus cortos veintidós años.
Enzo está sentado en el comedor frente al gran televisor, viendo un partido de la liga mientras toma mates. De reojo, logra ver que su hermana se esta poniendo su campera, como si se fuera a algún lado sola.
"Olivia ¿Qué estás haciendo?." Dice Enzo mientras se para y la alcanza.
"Enzo, ya tengo ocho, puedo ir sola." Le dice Olivia mientras abre la puerta para irse.
"Olivia Fernandez, tenes ocho años." La agarra Enzo del brazo "Sos una nena, no podes ir sola por la calle."
"Pero quiero un helado" Su hermana es especialista en hacerle berrinches, Enzo es especialista en cumplirle cada uno de ellos.
"Bueno, te llevo." Dice Enzo mirando a su hermana a los ojos, Olivia reprime una sonrisa "Pero lo tomas en el auto."
Olivia había logrado invadir incluso su auto. Hay una botella rosa en la puerta del acompañante, un sticker en el estéreo y los parlantes reproducen Olivia Rodrigo. Su hermanita se obsesionó con la cantante cuando se enteró que comparten nombre. Por supuesto no entiende nada de lo que dicen las letras, pero ella dice que es su cantante favorita. Enzo ya no opina sobre el tema, se resignó.
"La hermana más grande de Sofia me enseñó una serie." Le cuenta su hermana "Me dijo que seguro vos la conoces."
Enzo ya sabe de quién habla, Valentina. Una chica con la que va y viene de toda la vida, pero cortan una y otra vez. No sabe que es lo que los vuelve a juntar, pero siempre ambos vuelven a caer por el otro. Ahora ya hace tres meses no se ven. "¿Qué serie Oli?."
"Hannah Montana." Responde Olivia mientras sonríe de la forma más tierna posible. Enzo la ama tanto.
"La conozco y si, deberías verla." Enzo responde mientras maneja "Pero algunos capítulos los ves conmigo."
"Te lo prometo." Dice Olivia.
La heladería, con sus paredes azul pastel, tiene un encanto innegable. Aunque es un local nuevo, emana una sensación hogareña. Todo el negocio está impregnado de un rico aroma a crema y frutas frescas.
"Oli, ¿qué gusto queres?." Le pregunta Enzo a su hermana mientras se agacha.
"Quiero de dulce de leche y chocolate." Le dice su hermana sonriente "En cucurucho."
Enzo asiente y gira hacia el mostrador para pedir los helados y finalmente volver a casa a ver el partido en paz. No hay nadie, tampoco hay una campanita para tocar o alguna forma de llamar al empleado. Enzo no sabe si tiene que aplaudir, hacer un sonido con su garganta o decir "Hola.".
Para su suerte, antes de tomar la decisión equivocada, sale un chico de una puerta. El muchacho le quita todo el aire en sus pulmones, los cachetes se le sonrojan y la respiración se corta. Jamás vio a alguien tan hermoso.
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un poquito de amor - enzo y julián
RomanceMini historias de Julián Álvarez y Enzo Fernandez. Contenido extremadamente cursi.