“El hilo rojo nos une,
nos encontraremos en una
Siguiente vida”—¿Cual es su nombre?— Preguntó Minho, viendo aquel niño internado en la clínica de Jisung.
—Peter, sus padres lo abandonaron en la clinica hace dos meses al momento que se enteraron que él pequeño tiene cáncer terminal, se fueron y ya no volvieron— Minho frunció sus cejas ¿Cómo es que hay personas tan crueles en el mundo?.
—Esos malditos ¿Acaso no tienen corazón? ¿Siquiera son seres humanos? Pero ni los animales dejan abandonados a sus hijos— Minho sentía que la sangre le hervía del enojo, es que no es justo que hayan padres tan desalmados, ellos queriendo adoptar y no sé los permiten pero a los padres que abandonan a sus hijos no le dicen ni hacen nada.
—Tranquilo amor, ven vamos afuera, Peter se acaba de dormir después de la quimioterapia— Jisung tomó del brazo a Minho y lo saco de la habitación.
—¿Trataron de contactar a su familia?—
—Lo hicimos pero al parecer sus nombres eran falsos porque no aparecen por ningún lado?—
—Malditos, hay personas que no deberían ser padres, ¿Sabes cuantos días le quedan hasta que él cancer le llegue al corazón?— Jisung suspiro.
—El cáncer avanza demasiado rápido Min, no sabría con exactitud, hasta el momento ya se ha extendido a sus pulmones, yo diría que tiene aproximadamente dos o tres meses—
—¿Podemos cuidarlo en esos meses, llevarlo a casa y cuidarlo para que al menos sus últimos recuerdos no sean en una clínica?—
—Es cuestión de que Piter acepte, una trabajadora social lo visita y ayer hable con ella para que me dejara llevarlo a casa y esa es la razón por la que te pedí que vinieras a conocerlo, para preguntarte si podíamos llevarlo a casa—
—¿Lo podemos llevar a casa ahora?— Preguntó Minho emocionado.
—Claro que si, solo hay que esperar a que despie...— La alarma del cuarto de Peter sonó, Jisung salió corriendo con Minho detrás.
—¿Que sucede, Hannie?—
—No lo sé, quizá se esté ahogando, te dije que el cáncer llegó a sus pulmones así que a menudo se ahoga— Ambos entraron a la habitación pero se tranquilizaron cuando vieron a Peter sonreírles.
—Dios, Peter me asustaste— Le dijo Jisung, sentándose a su lado y acariciándole la cabeza, el pequeño tan solo tiene seis años.
—Perdon Daddy, apreté el botón por accidente y no sabía cómo apagarlo— Musitó el pequeño formando un pequeño puchero en sus labios.
—¿Te dice Daddy?— Preguntó Minho enternecido, Peter abrazo a Jisung sintiendo miedo.
—Hey tranquilo, ¿Recuerdas que te dije que pronto tendrías dos padres?— Peter asintió —Él es Lee Minho y si quieres le puede decir papá—
—¿El cantante?— Preguntó él pequeño.
—Asi que me conoces— Minho se acercó.
—Si, a mí mamá le gusta tu música— Minho frunció el ceño.
—Dime, Peter ¿Te gustaría ir por un helado conmigo? ¿Puede comer helado?— Le pregunto a Jisung.
—Puede pero solo una pequeña porción— A Peter le brillaron sus ojitos.
Y así fueron pasando los días, después de cada quimioterapia, los tres se iban a casa y hacían una maratón de series infantiles.
—Vamos Peter, tienes que salir del baño, un rico helado nos espera— Habló Minho intentando que él pequeño saliera del baño, resulta que recien le dió por avergonzarse de que está calvo.
—No, voy a salir, estoy calvo papá— Abrió la puerta un poco — Mira, la cabeza me brilla, todos se burlaran de mí— Dijo exasperado.
—Nadie se burlara de tí, amor, además tío Felix es cinta negra, puede noquear al que se atreva a decirte algo—
—Min— Jisung le dió un golpe en la espalda —La violencia no es buena.
—Lo dices porque tú no estas calvo— Le recrimina el pequeño.
—Pero lo estuve—
Los tres se convirtieron en una pequeña familia, salían al parque, comían helado, iban conciertos y se divertían, los padres de Peter, nunca regresaron por él y quiza era mejor así.
Pero todos sabemos que la felicidad no dura para siempre, tarde o temprano la muerte llega a reclamar lo que es suyo.
—Gracias por ser mis papis durante este tiempo, me hicieron muy feliz— los tres se estaban conteniendo para no llorar —En mi próxima vida quiero que ustedes también sean mis padres, los voy a buscar lo prometo—
—Adios, Daddy, adiós, papá— Peter cerró los ojos, el monitor del ritmo cardíaco decía que su corazón había dejado de latir.
Peter murió tres meses después de que Jisung y Minho se convirtieran en sus padres adoptivos y sin que ninguno se diera cuenta, el hilo rojo se entrelazó entre ellos para poder encontrarse en su siguiente vida.
Si gustan, pueden leer sobre la siguiente vida de Peter.
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Hilo Rojo- Nuestra segunda vida.
Romantik¿Quién dijo que amaras a alguien hasta que la muerte los separe?. El amor va más allá de la muerte, cuando estás destinado a estar con alguien, se volverán a encotrar en una segunda vida o en todas las vidas que tengas.