Fall In Love With You

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⚠️Necesito dar un pequeño aviso respecto a las actualizaciones de los fanfic's⚠️.

Consiste en que ahora no podré actualizar cada cuatro días, puesto que me encuentro un poco ocupada, entonces ya no tengo la oportunidad de actualizar tan seguido, así que solo actualizaré los fines de semana.

Espero y comprendan, y sin más...pueden seguir leyendo✨💞

Quizás se pregunten en qué acabó todo, o quizá solo se quedaron con ese final, déjenme decirles que hay algo más...¿Quieren saber qué es? Bueno, entonces sigamos.

📍🇪🇦 Zaragoza, España

— ¡Suelta eso! — decía en voz alta la infanta.

— Si, claro, tú primero suelta mi control — respondía el infante.

La pequeña castaña lo veía con los ojos entrecerrados ya que lo fulminaba con su mirada, aunque eso parecía no importarle a su gemelo, ya que actuaba como si no le importará, lo cual hacía que la pequeña se molestará más por la actitud de su hermano.

— Habló enserio, Vincent. — amenazaba la infanta.

— ¿Y tú crees que yo no?

Ambos mellizos estaban a punto de iniciar una gran guerra entre los dos, como era costumbre, pero siempre había algo que se los impedía y eso era su hermana mayor, Daphne, la cual siempre los terminaba separando, ya que era la mas tranquila. Está ocasión no sería la excepción ya que también haría lo mismo de siempre, separar a sus hermanos, pero antes debía ver quién era mejor peleando.

— Sabes que... — Vincent dejaba caer el collar de su melliza por la ventana, pero eso no era parte del plan ya que él nunca llegaba a ese punto de molestar a Tessa. — Maldición...

La castaña abrió los ojos como plato al ver lo que acababa de hacer su hermano, no podía creer que enserio lo hubiera dejado caer como si nada, así que sin dudarlo, tomó el control del chico y lo dejó caer por las escaleras, obteniendo así de él, la misma reacción que ella.

— ¿¡Qué te pasa Tessa!? — reclamaba el castaño.

— Tú empezaste, no hubiéramos llegado a ese punto de no haber sido por tú culpa.

El infante estaba tan molesto que solo tomo lo primero que vió a su alcance, su florete de esgrima, para declararle asi la guerra a su hermana, la cual de inmediato tomaba de igual manera su respectivo florete, pues ambos solían practicar el deporte.
De inmediato comenzaron a atacar uno al otro, claro, con sus debidas precauciones.

Mientras que Daphne solo salía de su habitación para ver ahora que ocurría entre sus hermanos pequeños, no había día de la semana que no pelearán, así que ya era normal para ella. Al salir decidió recargarse sobre las escaleras para ver qué es lo que sucedía, pero en cuanto vió lo que estaba ocurriendo incluso hasta ella se sorprendió, ya que a eso no habían llegado.