La fría madrugada azotaba con su viento las ventanas de la mansión Kang, donde en una del segundo piso se encontraba una adolescente de 16 años dormida placidamente en su gran colchón. Lastimosamente, su reparador sueño se vió interrumpido por su alarma, que sin rodeos la desperto.
-¡Ugh! Maldita alarma, ¡Es domingo!- se quejo la chica de ojos gatunos para posteriormente levantarse a apagarla y comenzar su día.- Bueno, día nuevo, vuelta al baño.- Se dijo a sí misma antes de despojarse de sus prendas de ropa y meterse a la tina del baño que tenía en su habitación.- Oh, sí...- Dijo con regocijo mientras aliviaba su estres y el de su loba interior.
-¡Kang Haerin!- Se escucho desde el exterior de la habitación de la alfa.- ¡Baja ahora mismo porqué te mato!- Estas palabras llegaron a oidos de la menor, quien se envolvió en su bata de baño, se colocó las pantuflas y bajo a ver quien era y a que se debía su llamado.
-¿Quien osa interrumpir mi hora de baño?- Interrogo la chica pelinegra al ver quien la llamaba...era Ye-seo, su hermana.- ¿Ye-seo? Dime para que me llamaste.
-Ye-seo rodo los ojos y respondió entre dientes.- A ver, pequeña cara bonita, hablame bien. Pero bueno, fuera de eso, ¿Sabes si tienes algo hoy?- Pregunto la Alfa mayor a la Alfa menor.
-Dejame ver...- Respondió Haerin en un tono suave mientras pensaba en sus actividades del día.- Tengo Italiano desde las 2:30 de la tarde hasta las 7:30 y luego tengo Inglés hasta las 9:45. Y más temprano, antes de italiano tengo sesión de fotos con Cartier, ¿Por qué?- Explico la adolescente.
-Quería saber si estabas libre ya que tengo unas amigas a las que les encantaría conocerte- Contesto poniendose la mano en la nuca timidamente.
- Si es antes de las 10:15, sí.- Musito en tono suave antes de mirar al reloj que marcaba la hora "5:20."
-¡Excelente! No te arrepentiras, Hae.- Exclamo antes de dar una palmada en el hombro de la Alfa antes de que se retirará.
-Mmj.- Musito la joven antes de subir a cambiarse.
Dando el reloj las 7:00 a.m. Haerin salió al encuentro con su hermana Ye-seo. La joven de ojos gatunos llevaba un vestido negro bastante elegante junto a un Blazer color hueso. En su muñeca derecha llevaba una pulsera de oro fino y en la otra un reloj blanco de marca Rolex.
-¡Vaya! Te ves bien, Kang.- alagó Ye-seo a su hermana menor quien sonrió ante el cumplido.- Vamos, nos estan esperando.- Añadió antes de tomar la mano de su hermana e ir directo al Lamborghini negro que las esperaba afuera.
Puesto a que ninguna había recibido amor en la infancia por parte de sus progenitores ya que se suponía que eran "máquinas de medallas, diplomas y buenas notas" así que el camino en el auto era silencioso solo como los Kang sabían disfrutar mientras hablaban casualmente de sus agendas para el día.
Llegando ya al lugar donde estaba el restaurante, bajaron del auto mientras se despedian de su chofer, el señor Kim Nam-Joon.
Llegando al lugar, las recibieron las tres chicas del grupo de amigas de la mayor.-¡Tu debes ser Haerin! Tu hermana nos habló de tí.- Hablo una de las jovenes viendo a la adolescente.
-¡Yah! Unnie, ¿Pretendes espantar a la pobrecita?- Regaño una beta menor que Haerin por unos años a la omega.
-Ush, te pasas.- Dijo la vietnamita rodando los ojos mientras una Alfa de camisa blanca, corbata negra y un blazer del mismo color aparecia a las espaldas de las chicas que peleaban y miraba con los ojos oscuros al par.
-¡Se dejan de pelear ya!- Ordeno alzando la voz en un tono grueso mientras su loba interior hacia relucir sus ojos rojos como el Ruby. Mientras que todas las demas miraban con asombro.- Dios mío, comportense.- Miro con desden a las chicas mientras salía a atender una llamada.
-¿Ves lo que haces?- Regaño la Omega mayor a la Beta.
-Callate los ojos, enana.- Respondió rodando los ojos y cruzando los brazos, siguiendo el ejemplo de la alfa que las había regañado minutos antes.
-Emm...sigo aquí.- Aviso Kang viendo la pelea.
-¡Ay! Lo siento, disculpa nuestra mala educación, Lee Hyein, un gusto.- Se presento la menor haciendo reverencia.
-Pham Hanni, un gusto- Se presento la mayor extendiendole la mano.
Luego de esa charla. Llego la alfa de antes a presentarse, sus ojos ya no eran rojizos como el ruby, sino de un color chocolate.
-Disculpa a estás tontas, por cierto, Soy Kim Minji- Hablo la mayor extendiendole la mano.
-Kang Haerin, un gusto.- Sonrió con amabilidad hacia la mayor de cabello negro.
La mañana fluyo con normalidad hasta que dieron las 10:15 a.m. así que Haerin llamo al chofer y se dirigió hacia afuera no sin antes haberse despedido de su hermana y sus amigas.
Durante el camino le pidió al chofer que le dijera a su mánager de favor que le llevará al estudio el uniforme del instituto de italiano.En el estudio empezo a prepararse para las fotos que le tomarían puesto que aparecería en "Vogue" y sus estilistas estaban haciendo un gran esfuerzo por dejarla más irreal de lo que ya era.
-¡Exelente trabajo por hoy!- dijo el camarógrafo mientras Haerin se desmaquillaba y se vestía para ir al instituto.
Al llegar al instituto dejo su mochila y fue a buscar a Jiwoo, su amiga desde cachorras y la única que la comprendía.
-Ya veo, tuviste una mañana apretada.- Comprendió la mayor viendo a su demacrada amiga aunque esta no hubiera dicho nada.- Ven.- Le dijo palmenado su regazo dandole a entender a Haerin el mensaje correcto haciendo que esta última posara su cabeza sobre su regazo.
-Mmm...estoy cansada, despiertame cuando debamos entrar a clases- Pidió la alfa de ojos gatunos dejando liberar unas feromonas de cansancio que la omega Podía detectar.
-Ya, duermete, esta bien.- Dijo mientras acariciaba el pelo de aquella chica que Yacía en su regazo.
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Holaaaa, estos dos capítulos se trataran de como es la vida de Danielle y Haerin, así se vayan dando una idea de como vive la vida cada una, no sean impacientes, si voy a subir el capítulo uno...pronto.
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𝒟𝒐𝒔 𝒎𝒖𝒏𝒅𝒐𝒔 🄳🄸🅂🅃🄸🄽🅃🄾🅂 (𝒟𝓪𝓮𝓻𝓲𝓷)
Roman d'amourHaerin, la hija menor de los Kang, es una chica con logros a destacar que enorgullecen a sus padres, medallas olimpicas, en materias colegiales como matemáticas y se le hace el honor de poder llevar la bandera del país. Danielle, siendo contraría a...