Capitulo 24 - Cruel Pasado

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Las gotas de agua arrasaban con todo a su paso sin importarle la vida que estaba apagando con su fría y abrumadora fuerza. Tres corazones flamantes casi apagándose en una triste y débil caja de madera la cual se iba pudriendo cada vez más y más por el paso de los años.

¿Cómo el mundo puede ser tan cruel para unas pobres almas que solo buscaban el cariño y el dulce canto de su madre?

Tal vez ellos no estaban hechos para sentir dicho afecto. El peso recaía en la flama más fuerte que buscaba cuidar y proteger a las más pequeñas de esta inundación que fácilmente podía apagarlos. El llanto de los inocentes llegó a los oídos del mayor.

- Shh, shh -. Los abrazo con calidez para tratar de apartar el infernal frio que atravesaba sus débiles cuerpos – Estoy aquí – Consoló en un tono amoroso logrando calmar un poco su desesperación.

Los truenos hicieron que los niños comenzaran a llorar mucho más fuerte. Su pequeño hermano mayor gruño con angustia, no podía tenerlos allí, sus cuerpos temblaban gritando ser calentados por una simple manta para tranquilizar sus pedidos.

- ¿Qué hago? .¿Qué hago? – murmuro para si mismo mientras otro relámpago aparecía en el cielo y aterraba a sus hermanitos

Sin embargo Dios pareció no escucharlo por el fuerte y aterrador viento que los hacía temblar cada vez mas y mas, el miedo de que resfriaran lo invadía como una avalancha mientras que la nieve traspasaba su piel y se enterraba en sus venas de una manera tan dolorosa y tortuosa ...Pensar que solo tiene quince años para experimentar algo tan horrible

Después de varias horas horribles y desesperantes para estos pequeños seres que apenas comenzaban a vivir, una vida que ellos no pidieron, que solo querían ser felices pero la fortuna no estaba de su lado. Nunca lo estaba.

El mayor se levanto con sigilo mirando a su alrededor para que aquel cruel y severo anciano, dueño del negocio, al lado de donde estaban escondidos no los descubriera. Vio el piso lleno de barro, por la mezcla de tierra con la fuerte lluvia que hubo haciendo un completo desastre esta área del pequeño pueblo. Al notar que era seguro, regreso a donde sus hermanos para sacarlos de allí e ir a un lugar mas seguro.

- Vamos - Llamo con un tono dulce.- tenemos que salir de aquí - Con fuerza subió a uno de los pequeños a su espalda para cargarlo mientras al otro le tomaba de la mano para no perderlo .

- ¿Y el hombre malo? - pregunto con un hilo de voz el niño que estaba en su espalda -¿Se fue? –

- No hagamos ni un ruido -murmuro mientras salean del callejón y a paso rápido caminaron mas y mas lejos de aquel lugar donde la noche anterior el viejo, dueño de ese local les lanzo agua caliente para echarlos – Viejo decrepito – murmuro el mayor con odio .

- Detrepito? – Repitió el niño que le tomaba la mano, curioso por saber que era .

El mayor se detuvo ya a unas dos cuadras lejos de ese infernal lugar, con sorpresa volteo a ver a su hermanito y frunció el ceño, aprendía rápido, pero no quería que en su mente se marcaran ese tipo de cosas. No quería eso.

- No vuelvas a repetir eso - Le miro con angustia - Bill -

El niño de ojos ámbar hizo un pequeño puchero sin poder comprender bien el porque la actitud de su hermano, el la dijo ¿Por qué el no podía? .

- Tenemos que buscar algo de comer – miro a sus alrededores sin embargo no había nada abierto a sus alrededores, después de todo ¿Quién iba a abrir después de aquella tormenta .- Esto es una porquería - Cerro los ojos con impotencia .

Bill Hood Donde viven las historias. Descúbrelo ahora