Un mes, treinta días, setecientos veinte horas, cuarenta y tres mil doscientos minutos y dos millones quinientos noventa y dos mil segundos.
Era el tiempo que había pasado desde la última vez que Yuki vio a los pilotos de McLaren y Red Bull en persona. A pesar de haber sido la primera vez que interactuó con sus padres no biológicos, el japonés no pudo evitar sentir una conexión. Una unión tan especial que cada vez que recordaba aquel corto, pero especial tiempo compartido, bueno, no podía evitar llorar un poco.
A veces se despertaba en la noche, angustiado, nervioso, sin saber si aquel momento tan mágico había sido verdad. Mas, le bastaba con sólo abrir su celular y buscar en su bandeja de entrada los mensajes más recientes que Oscar y Lando le habían enviado para darse cuenta que no, no lo había soñado. Que era verdad el hecho que conoció en persona a sus dúos favoritos de la Fórmula 1 y que, aún mejor, pudo seguir en contacto con uno de ellos.
Cuando lo visitaron en la cafetería hace poco más de un mes, no sólo le dejaron las firmas de Max y Checo, posesión que añoraba y adoraba con todo su corazón. También le brindaron una pequeña, pero adorable carta que Yuki leía cada vez que estaba deprimido, lo cual era muy seguido. Aquellos dos regalos que de por si eran lo suficientemente especiales como para hacer al japonés gritar de felicidad, no se pudieron comparar con la entrega de confianza que el dúo papaya le había otorgado: conocer sus cuentas privadas en redes sociales.
Cuando Yuki vio los usuarios por primera vez, creyó que era una broma. Pero después de buscarlos y darse cuenta que en serio eran ellos, bueno, llámenlo dramático, pero se puso a llorar. 'Ellos en serio me valoran como su amigo', el que Oscar y Lando le hayan abierto no solamente su corazón, sino también la puerta a su vida privada, bueno, fue totalmente una sorpresa bien aceptada para el azabache.Aún recuerda como las primeras semanas de mensajes no fueron otra cosa más que incómoda. Yuki no sabía si había una forma correcta para hablarles, ya que no acostumbraba a hablar con nadie por mensaje y por su obvio fanatismo hacia el dúo papaya. Mientras que el australiano y el inglés apenas y tenían tiempo para hacer otra cosa más que prepararse para las próximas carreras.
Yuki, siendo un total inexperto en el tema de la amistad y aún más en mantener una buena relación a distancia, no pudo evitar preocuparse. Pues, sentía que no estaba siendo lo suficientemente buen amigo como para que Oscar y Lando le hablasen seguido. 'Quizás al final nunca fui tan especial.'
Pero ambos pilotos parecieron detectar de alguna forma la creciente ansiedad del japonés, por lo que trataron de tener al menos cinco conversaciones distintas al día en el chat grupal. Los días pasaron y lo que empezó como mensajes cortos y discontinuos, pronto se convirtieron en largas hileras de mensajes, fotos y hasta videos adjuntos. Fue un proceso de práctica y error, pero tuvo como grandioso resultado la mejora en su amistad, lazo del que Yuki jamás se creyó capaz de tener.'Al fin tengo amigos, mis papás estarían tan orgullosos', Yuki no podía evitar soñar despierto en un mundo donde, quizás, solo quizás, él también fuese un piloto. Se imaginaba siendo cuidado por el dúo de Red Bull, pero más por el mexicano. Podía verse jugando con Lando y Oscar en el paddock. Pero, sobre todo, se imaginaba teniendo personas a las cuales podría llamar familia. Una etiqueta desconocida, pero ansiada por el pequeño japonés.
Desde que tenía memoria, Yuki podía contar con los dedos de sus manos a las personas que realmente se habían interesado en él en algún momento de su vida. Ni siquiera sus padres, su familia sanguínea, formaba parte de esa cuenta pues, la inexistente presencia de su padre en su vida lo eliminaba completamente de la ecuación. 'Ni siquiera fue capaz de estar cuando nací', lo único que había hecho su padre, además de crearlo y abandonarlo, era darle su apellido. Tsunoda, sólo otra etiqueta más que odiaba.
ESTÁS LEYENDO
chestappen mis papás; yuki & chestappen
ContoEn donde Yuki Tsunoda es un gran fan de la Fórmula 1, pero aún más fan de la pareja de Sergio 'Checo' Pérez y Max Verstappen, de la cual se considera su fan número 1 y su hijo perdido. "Chestappen mis papás" 𝙣𝙤𝙩𝙖𝙨 𝙙𝙚𝙡 𝙖𝙪𝙩𝙤𝙧: Mención de...