˖ ֹ੭୧ 𝓥ulnerables ⊹ ࣪ ⑅ (bkdk)

ִֶָ𓂃 ࣪˖ 13. ࿐

Katsuki estaba en su habitacion de la casa de su madre, sentado en la cama recién bañado, al despertarse había salido a correr y había vuelto con el tiempo justo, cuando su teléfono vibró con un mensaje nuevo. Lo tomó y vio que era de Kirishima.

- Pelo de mierda. -

Oye, Bro. Todo está listo. Tienes que llegar al salon acordado para la fiesta sorpresa. No llegues tarde.
Leído

Katsuki leyó el mensaje, sus labios torciéndose en una ligera mueca. Aunque la idea de una fiesta sorpresa no le emocionaba, especialmente con todo lo que había pasado entre él e Izuku, sabía que no podía faltar. Tomó su chaqueta y respondió rápidamente.

- Pelo de mierda. -

Oye, Bro. Todo está listo. Tienes que llegar al salon acordado para la fiesta sorpresa. No llegues tarde.
Leído

Entendido. Voy para allá.
Leído

Guardó el teléfono en su bolsillo y salió de su casa, caminando hacia el café-bar donde se reunirían. El aire fresco de la tarde lo ayudaba a despejar un poco su mente, pero el nerviosismo seguía ahí, latiendo en el fondo.

Al llegar al lugar, lo primero que notó fue la decoración. Todo estaba lleno de colores vibrantes, principalmente los colores de All Might: azul, rojo y amarillo. Carteles con la imagen del antiguo héroe número uno estaban por todas partes, y una gran pancarta colgaba de los árboles con un "¡Feliz Cumpleaños, Deku!" en letras grandes.

Katsuki dejó escapar un suspiro, metiendo las manos en los bolsillos mientras se acercaba al grupo de amigos que ya se encontraba allí, arreglando los últimos detalles. Kirishima lo vio llegar y fue directamente hacia él, con una sonrisa amistosa.

- Bakugo! Me alegra que hayas venido! - dijo Kirishima, dándole una palmada en la espalda. - Y también me sorprende.

- ¿Por qué no habría de venir? - respondió Katsuki, su tono neutral. Aunque no lo admitiera, la presencia de Kirishima le traía algo de alivio. El chico lo observó con una mezcla de curiosidad y preocupación.

- Bueno, solo lo digo por.. Midoriya, quiero decir. ¿Están peleados o algo? - el rostro sorprendido del rubio le dio la señal de que debía aclararse. - No quiero sonar entrometido, pero desde ayer que los vi hablando afuera, ambos están extraños.

Katsuki desvió la mirada, sus ojos fijándose en las decoraciones como si fueran lo más interesante del mundo.

- ¿Qué tanto viste? - Preguntó molesto. Kirishima le explicó que solo los había visto afuera, y nada más. - No estamos peleados.

- Bueno, me alegra oír eso. Solo quería asegurarme de que todo estuviera bien. - Kirishima asintió, sin querer presionar más el tema.

El contrario no respondió, simplemente observando a los demás ajustar las decoraciones. El lugar era bastante igrande, y se llenaba poco a poco con los amigos de Izuku, todos esperando el momento en que llegara para darle la sorpresa.

Finalmente, llegó la hora. Alguien anunció que el cumpleañero estaba cerca, y todos se escondieron detrás de la mesa del bar, dejando el centro del lugar despejado. Katsuki se quedó un poco más atrás, apoyado contra una viga, con los brazos cruzados mientras esperaba.

El sonido de pasos se escuchó, y luego la voz de Izuku, que parecía estar hablando con alguien. Cuando entró al lugar, todos saltaron de sus escondites, gritando al unísono: "¡Sorpresa!"

Izuku se quedó paralizado, sus ojos abriéndose con sorpresa genuina. La emoción lo abrumó de inmediato, y antes de que pudiera controlar sus sentimientos, las lágrimas comenzaron a brotar.