La eriza se encontraba caminando camino a su hogar, la lluvia había cesado aunque aún permanecía un tono gris en el cielo, lo que según ella le daba el toque final a su día. Cuando caminaba cerca de las colinas verdes y húmedas a lo lejos se topó con una pequeña casa amarilla en forma de domo con detalles blancos, la pintura parecía ya desgastada y el amarillo era algo opaco.
— Es la casa de Tails — Dijo la eriza mientras una sonrisa se formaba en su rostro mientras aceleraba su paso en dirección al pequeño taller hasta pararse frente a su puerta, la eriza dio un leve suspiro y la miro fijamente — Espero no molestarlo — Dijo algo indecisa de si tocar la puerta, aunque al final se decidió por tocarla, ya que al menos quería pasar saludando a su amigo zorro — ¡Knock Knock! Adivina quién soy — Agrego divertida mientras lentamente la puerta se abría —
— Oh, hola Amy — El pequeño zorro abrió la puerta solo un poco, dejando ver solo su cabeza y parte de su cuerpo —
— Espero no molestar, estaba paseando por aquí y quise ver como estabas — Agrego muy sonriente mientras mantenía un cierto espacio entre ella y su amigo inventor —
— No, de hecho, estaba tomando algo de té y galletas — Dijo mirando hacia el techo mientras lentamente abría la puerta en señal de que dejaba pasar a la eriza — Puedes pasar si quieres.
La eriza de pelo rosa sonrió dulcemente ante el gesto de su amigo. La verdad es que Tails era conocido por ser bastante reservado e introvertido, pasando la mayor parte del día en su taller y asistiendo raramente a reuniones sociales. Al entrar al taller, se detuvo primero para limpiar sus botas en el felpudo tapete, luego colgó su paraguas y su chaqueta en el perchero.
— ¡Vaya, Tails, esto está impecable! — Exclamó sorprendida al ver lo ordenado que estaba el taller. — Supongo que has aprendido de la mejor — Afirmó orgullosa, mientras su amigo se dirigía hacia un pequeño sofá frente a una mesa que sostenía galletas y dos tazas de té. — Una fiesta de té, ¡me encanta! —
— Si ibas a venir tenía que asegurarme de que todo estuviera reluciente — Comento el pequeño zorro mientras tomaba asiento y estiro su mano hacia el plato de galletas — No quería que me dieras otro sermón del porqué tengo que mantener todo reluciente y blah blah blah — Llevo la galleta hasta su boca dándole un mordisco — Y claro que prepare té y galletas, porque sé que te encantan —
— ¿Cómo sabías que iba a venir? — Pregunto la eriza curiosa mientras se sentaba al lado de su amigo — ¿Acaso por fin instalaste cámaras por todo Green Hill? ¡Dímelo! — Dijo la eriza con una mirada expectante y curiosa hacia el zorro —
— Nada de eso, aunque lo de poner cámaras es una buena idea... — Bebió un poco del té — En realidad, era un poco obvio que saldrías a pasear, sobre todo en un día lluvioso, así no tendrías que encontrarte con Sonic. — Comento el zorro mientras dejaba la taza en la mesa —
— Odio que seas tan inteligente... jaja, mentira, me encanta que seas inteligente, pero es un arma de doble filo supongo — Agrego un poco apenada la eriza — Sabes que quiero arreglar las cosas, pero Sonic es imposible de tratar, es testarudo, un mal educado un grosero, un- — Su hablar fue interrumpido por un "Aham" de parte de su amigo a lo que ella apenada baja sus orejas — Perdón, creo que hable de más —
— Recuerda que tanto yo como tú estamos en los freedom fighters y luchamos por mantener la paz en Mobius, no nos conviene meter nuestros asuntos personales en nuestro deber como protectores del mundo — Exclamo el zorro en un tono firme, pero sin rozar lo grosero o autoritario — Así que será mejor que dejes de prestarle tanta atención a Sonic, tarde o temprano ustedes dos se encontrarán y tendrán que luchar en equipo —
— Ohh Tails, no sabes cuanta razón tienes, pero simplemente me es difícil actuar normal cuando Sonic está cerca — La eriza hizo una pausa para tomar un poco de té — Pero tienes razón, le estoy prestando demasiada atención a ese tema, proteger el planeta y a sus habitantes es mucho más importante que un tonto drama adolescente. — Exclamo la eriza con su característico positivismo, a lo que el zorro de reojo la vio mientras una leve sonrisa se formaba en su rostro, sin duda este estaba alegre de tener a la Amy de siempre con él —
Tails y Sonic no tenían una amistad tan marcada como la tienen él y Knuckles, Tails consideraba que Sonic era todo lo contrario a el y por esa razón su relación nunca avanzo más allá de buenos compañeros de trabajo, Sonic nunca se tomó la molestia de saber más de él y tampoco es que a Tails le importara tanto eso.
(...)
— Y luego Knuckles dijo "Ahgg tendré que comenzar a cobrar por hacer esto" me quise burlar en el momento, pero preferí golpear a Metal — Decía un erizo de pelaje azul mientras comía una rebanada de pizza y estaba recostado en una hamaca, se encontraban en la base supersecreta de los freedom figthers, o sea su casa —Diosss, amo la pizza, ¡es el mejor invento del mundo! —
— Meh, prefiero los mariscos — Agrego el echidna sentando en el suelo mientras disgustaba una rebana de pizza — Aunque no sabe tan mal —
— Ustedes dos siempre se divierten sin mí, tal parece que los demás no existimos — Comento una chica ardilla mientras estaba sentada en el sofá con una pierna cruzada, era Sally Acorn, una de las miembros más reconocidas de los freedom fighters —
— Bueno, tampoco es que haya mucho que hacer, yo resuelvo casi todos los problemas en este lugar, lo tengo todo controlado, Sal — Comento el erizo mientras devoraba la última rebanada de pizza, un gran suspiro de satisfacción salió de su boca para luego cerrar los ojos —
— Si, totalmente — Agrego la ardilla mientras veía al erizo de reojo, un leve sonrojo se hizo aparecer en sus mejillas — Ahh, por cierto, ¿aún no han hablado con Amy? —
El echidna se quedó en silencio mientras esperaba que su compañero hablara antes, sin embargo, eso no paso, ya que el erizo se encontraba con los ojos cerrados y roncando levemente, las cosas no se encontraban para nada bien en el equipo, no solían ser como antes de unidos donde el problema de uno era de todos, tiene un poco de sentido debido a que han crecido y cada quien tiene su propia vida, como es el caso de Tails, pero con Amy era diferente, habían tenido un malentendido (según palabras del mismo Sonic) y esta decidió distanciarse temporalmente de ellos.
— Lo siento, no sabía que el tema era así de delicado — Dijo la ardilla poniendo una mano sobre su nuca algo apenada —
— No tengo problemas con ese tema Sally, pero parece que Sonic sí lo tiene — Dijo volteando levemente su cabeza hacia el erizo — Será mejor no preguntarle por ahora. —
— Entiendo.... pero si me dejas opinar, creo que Amy es una exagerada — Comento la ardilla con cierto desprecio — Sonic simplemente se cansó de su molesta actitud, que lo acepte y ya —
El echidna se mantuvo en silencio otra vez, dejando un silencio incómodo en el ambiente. Hasta que después de unos 5 minutos decidió hablar
— Creo que nos están observando. —
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♡Metal Rose ۵
Roman d'amour۵ ¿Alguna vez te has sentido observado, rechazado, excluido? Pues eso es lo que nuestra querida protagonista, Amy Rose experimenta. ۵ ¿Alguna vez te has sentido inútil, una copia y un ser desechable? Eso es lo que Metal Sonic experimenta. ... Portad...