Desastre natural, dependo de decenas de miles de millones de suministros

capitulo 71

"Capitán Sun, sé que va a transportar comida. ¿Puede dejarnos unirnos? Solo necesitamos la mitad de la recompensa". Shu Qing pidió la opinión de otras personas y todas querían. para transportar alimentos.

Es difícil encontrar suministros en el hielo y la nieve, y lo mismo ocurre en la base. Es mejor intentarlo. La recompensa del equipo de transporte de alimentos son cien gatos de arroz, y solo necesitan cincuenta gatos.

El Capitán Sun comenzó a pensar detenidamente. El equipo de transporte de granos fue atacado por un oso antes, por lo que faltaban algunas personas y los demás podían compensar esta brecha.

Como están dispuestos a reducir la recompensa a la mitad, no es imposible traerlos. "Si el resto de su equipo está de acuerdo, entonces síganlo".

En comparación con el delgado Shu Qing, el Capitán Sun valoraba más a las personas con las que viajaban.

El rostro de Shu Qing se iluminó, "Gracias, Capitán Sun, les contaré las buenas noticias".

Junto con Shu Qing y otros, el equipo de transporte de granos continuó partiendo.

Wen Xin y Yang Mohan estaban atrás como de costumbre, sin pelear ni agarrarse.

El equipo de transporte de cereales llevaba menos de una hora caminando cuando la carretera quedó bloqueada. La razón fue que dos vehículos volcaron porque la carretera estaba demasiado resbaladiza.

No tuvieron más remedio que ayudar a levantar el coche, de lo contrario no podrían pasar.

Justo cuando Wen Xin estaba a punto de bajarse del auto, Yang Mohan se acercó por detrás y dijo: "No te bajes, yo iré". Fue

más que suficiente para que docenas de hombres fuertes levantaran un auto. Entonces Wen Xin no se bajó y lo sacó del espacio. Coge un trozo de chocolate para reponer energía.

"Dong dong dong ~" Se golpeó ligeramente la ventanilla del coche.

Wen Xin bajó la ventanilla del auto y vio a Shu Qing parado afuera.

Antes de que Wen Xin pudiera hablar, Shu Qing levantó la canasta que tenía en la mano para mostrarle: "Recogí algunos de los suministros que los aldeanos me obligaron y te los di".

Sé que no los quieres, pero yo. "Estoy avergonzado. Toma el mérito, tómalo". Shu Qing sonrió y se metió en el auto de Wen Xin.

Se dio la vuelta y se fue sin darle a Wen Xin la oportunidad de negarse.

Las delicadas cejas de Wen Xin se fruncieron y finalmente dejó la canasta a un lado. Echó un vistazo rápido y vio que había dos coles chinas, un trozo de tocino y algunas batatas.

Recordó vagamente que Shu Qing no recibió mucho de los aldeanos. Después de darle tanto, no le quedó nada.

Shu Qing es bastante generoso. ¡No hay mucha gente que pueda ser tan considerada con los demás en los últimos días! !

Poco después, los dos coches volcados se apartaron a un lado de la carretera. Los propietarios intentaron arrancar los coches, pero no lo lograron.

Desesperados, sólo pudieron preguntar si podían ir con el convoy.

El líder del auto, Jianming, miró al Capitán Sun suplicante: "No tenemos suministros y ahora el auto está averiado. No es realista regresar caminando. Los dos somos buenos boxeando y pateando, y también "Por favor, llévanos contigo".

Además, el propietario de un automóvil, Zhao Hua, también suplicó. El

Capitán Sun no aceptó que se unieran al equipo de transporte de granos. "Puedo llevarlos. Tenemos suficiente gente en el equipo y no hay escasez de mano de obra". Entonces, dos personas más subieron al convoy y el Capitán Sun preguntó quién estaba dispuesto a transportarlas. Los ojos de Zhao Hua recorrieron todos los autos del convoy y finalmente sus ojos se posaron en el auto de Wen Xin. Su auto se veía mejor y debía ser cómodo sentarse en él. Yang Mohan, que estaba cerca, notó su mirada y dijo en un tono tranquilo: "La dueña de ese auto es una niña, así que no te conviene entrar. Zhao Hua, quien estaba expuesto, se sintió un poco avergonzado ". en su rostro y replicó con confianza: "No dijiste que querías tomar ese auto. ¿Por qué estás tan emocionado?" Yang Mohan lo miró con ojos fríos, "Tú mismo lo sabes, el Capitán Sun conocía la importancia de Yang Mohan ". A la base, tosió levemente y en voz alta suavizó las cosas y dijo: "Lo que dijo es correcto. Los hombres deben sentarse con los hombres". Finalmente, el Capitán Sun señaló dos autos y dijo: "Ustedes vayan ". por allí." Después del interludio, el convoy continuó avanzando. La ventaja de estar detrás del convoy es que no tienes que quitar la nieve, ya que los coches que van delante ya han despejado la carretera. La velocidad del convoy era lenta y Wen Xin comía cecina tranquilamente. El coche estaba cálido como la primavera y él estaba tranquilo y cómodo. Por la tarde, la caravana pasó por un pueblo y todas las casas estaban vacías. "Los aldeanos aquí deberían ir a la base. Como no hay nadie, Hairpin puede encontrar una habitación para vivir", dijo el Capitán Sun, "Aún quedan doscientas herramientas por recorrer. Si vamos rápido, podemos llegar allí". en dos días." Estas palabras hicieron que las personas que habían tenido un día agotador sintieran algo de consuelo. Las casas circundantes quedaron congeladas como iglús. Después de pensarlo mucho, Wen Xin decidió quedarse en el auto esta noche. Los iglús de aquí no son mejores que los del Ártico. Hacen mucho frío y todo el que entra siente escalofríos. La ventaja de vivir en un pueblo es que hay mucha leña y toda la casa está llena de leña. Trabajaron juntos para encender el fuego y, a medida que subió la temperatura, poco a poco dejaron de sentir frío. Shu Qing encendió un fuego solo y le arrojó algunas batatas. El aroma no tardó mucho en salir. Estaba demasiado avergonzada para tenerlo todo para ella sola: "¿Quieres comer? Pero no hay muchos". Algunos dijeron educadamente que no, mientras que otros descaradamente se acercaron y eligieron uno grande. Shu Qing no estaba enojado al ver su rostro sonriente, también la trató dos veces. Wen Xin encontró una cocina y comenzó a cocinar. Yang Mohan la ayudó: "Esta noche hagámoslo simple. Costillas de cerdo, zanahorias guisadas y melón de invierno y papas ralladas salteadas. Los platos eran pequeños, pero las porciones eran suficientes". para ellos dos. "Está bien", Yang Mohan fue a lavar los platos y él lavaría el agua fría, mientras Wen Xin se encargaba de cocinar. Para evitar que algunas personas entraran y causaran problemas y afectaran su estado de ánimo, Wen Xin cerró la puerta de la cocina con llave. No había agua ni electricidad en el pueblo y la cocina estaba un poco oscura. Wen Xin fingió hurgar en las cajas que trajo, pero en realidad sacó una lámpara recargable de bajo consumo del espacio y la colgó en la pared. Yang Mohan no estaba inactivo cuando Wen Xin estaba ocupado. No había mesa de comedor en la cocina. Sacó los ladrillos de la esquina y los colocó, luego colocó una delgada tabla de madera sobre ellos y se construyó una mesa sencilla. Mientras comía, Wen Xin puso un trozo de costillas en su plato. Yang Mohan miró y arqueó levemente las cejas, ¿qué significa esto? "Escuché todo lo que le dijiste al dueño del auto", Wen Xin frunció los labios y explicó. Incluso si esa persona viniera, ella se negaría, pero Yang Mohan la ayudó y se convirtió en una mala persona, por lo que ella naturalmente le estaba agradecida. "De nada, ¿cuál es la relación entre nosotros?", Respondió Yang Mohan casualmente. Wen Xin no respondió a esta pregunta. Aparte de la amistad, ¿qué más podría ser? Es extremadamente difícil para Wen Xin que ella la reconozca como una amiga. Yang Mohan también trajo su propia incubadora. La rebuscó, sacó una botella de yogur y la empujó frente a Wen Xin. A Wen Xin no le sorprendió su operación. De repente pensó en algo y caminó rápidamente hacia la estufa. Al ver que el carbón del interior no se había extinguido, le arrojó algunas batatas.