"Soñé con las lineas de tu mano y vi mi futuro" E.S
Los días siguientes fueron realmente alentadores para el cuadro medico de Fina, los medicos se mostraban optimistas ante ello. La familia se mantuvo unida, estaban ahí dando ese apoyo que siempre nos merecimos y tendrían que haber demostrado a nuestra relación sin embargo ahora no tenia tiempo de hacer aquellos reproches, era consciente que había heridas que les debía una charla para así poder sanar aquello que de alguna forma hacia ruido en la relación con los suyos, hoy su prioridad era Fina una vez que ella se recuperase tomaría cartas en el asunto.
Hola, cariño - suspiro - estás hermosa hoy, has mejorado en estos días espero con ansias a que tus ojos vuelvan a iluminar mi vida Fina - termino de decir dejando un beso en su mano.
Regreso en unos momentos, debo solucionar unas cosas pero volveré, descansa cariño - a Marta la dejaba más tranquila decirle a Fina las cosas, no sabia si ella podía escucharla pero de alguna manera quería que ella supiera que siempre regresaría.
Al salir de la habitación, le pidió a Adela que se quedara con Fina para cuidarla y mantenerla al tanto de cualquier cosa que pudiera surgir. Se marcho junto con su madre al hotel donde se estaba quedando, que tenia dos cuadras de distancia del hospital para mayo comodidad, al llegar decidió tomar un ducha para relajarse un poco, después preparo un muda de ropa pasar la noche que la aguardaba. Al salir en la mesa la esperaba una taza de café al lado de la compañía de su madre que la adornaba con una dulce sonrisa que le reconfortaba el alma, redujo la distancia entre ambas con un abrazo que estaba necesitando, su madre la sostuvo repartiendo besos en su cabeza y dando caricias a su espalda se sintió como aquella niña que alguna vez fue.
Tomo su lugar en la mesa, mas no soltó la mano de su madre y el silencio que compartieron hizo pasar un momento agradable entre tanta emociones que la recorrían, pero su madre fue prudente en la espera para después tomar el inicio de la conversación.
Marta- fue directa- ¿como te encuentras? Se honesta conmigo, por favor.
Si era honesta como se lo pedía su madre, le tendría que decir que la angustia la estaba atravesando porque tenia a fina con ella al menos físicamente pero no consciente, la tenia pero al mismo tiempo no eso la desgastaba por la noches, no se permitía dormir por miedo a despertar y que solo fuera un sueño, llego a creer que todo esto era no era real, que lo real era que Fina no estaba. Las lagrimas salieron sin permiso, ni siquiera tuvo noción de ello hasta que se percato de la mano de su madre limpiando su rostro, poso su cabeza en la mano y la tomo apreciando la calidez de la muestra de cariño. Fue honesta.
La extraño, demasiado Madre - cerro sus ojos - siento que la tengo, pero al mismo tiempo no, esta pero no esta. Quiero creer que en cualquier momento despertara pero los días pasan y ella no regresa, no tengo su mirada - un nudo se formo - no veo viviendo sin ella, a lo sumo sobreviviré porque ella es mi vida.
Cariño, ella esta progresando favorablemente se que es difícil esta espera pero ella sigue aquí, no se ha ido, la tienes todas la noches en cada que sostienes sus manos, cada caricia, cada palabra que compartes pero sobre todo con tu presencia hija el estar con ella hace la diferencia - dejando un suave apretón de manos de por medio - no te agobies, enfocate en estar para tu mujer ahora ella es tu prioridad.
Es extraño oírte llamarla de esa manera - sonrió y bajo su mirada, susurrando - mi mujer, ella es mi mujer.
Lo es, se que no es el momento para darnos esta charla Marta lo haremos cuando todo pase pero, es así ella y tu son familia. Debes cuidarla, yo sere tu apoyo hija hasta que tu lo necesites.
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UN VESTIDO Y UNA FLOR
Historical Fictionen esta ocasión era real y más vivido que nunca porque el peso de la frente de Marta sobre la suya le hacían palpar su presencia, su mirada sosteniéndola mientras le ofrecía el mundo que era ella y su respiración marcando las pulsaciones de su pecho...