En el mundo mágico, una nueva generación de brujas y magos se prepara para su ingreso en Hogwarts.
Catorce peculiares niños recibieron su invitación al Colegio Hogwarts de Magia y Hechicería para iniciar su educación en las artes mágicas y mientras...
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Gemma bostezo, no solo tenía sueño pero volvía a tener hambre. Y nadie podía ayudarla. Bueno, tal vez solo los argumentos de Libby y Sam.
—Que suerte tienen de estar en mi equipo. —dijo Sam cruzando los brazo y con una ceja alzada, mostrando su confianza antes de que perdiera el equilibrio cuando falló en apoyarse en la pared de la escalera donde esperaban. —Soy experto en astronomía.
Gemma, Libby y Sawyer se rieron.
Era la primera vez que los alumnos más chicos tenían Astronomía. La semana pasada tuvieron que cancelar la clase por un percance que obligó a todos los estudiantes a estar en sus dormitorios antes de las ocho. Nadie del cuerpo estudiantil sabía que había pasado pero había rumores.
La mayoría solo pensaban que alguna criatura del profesor Nabokov había escapado. Los hermanos mayores de Callie y otros, sin embargo, decían que era algo más grave. Maeve, como mejor amiga de la prefecta de 5to, dio a entender que alguien se había infiltrado a Hogwarts.
Algo increíblemente grave que no deberías decirle a niñas de 11 años en su primera semana en el colegio.
Después James y sus amigos, empezaron a inventar historias (o eso quería creer Gemma) sobre un temible hechicero que había estado prófugo del Ministerio y que tenía asuntos pendientes en la escuela. Y que haría lo que fuera para conseguir lo que tenía planeado.
Gemma estaba segura de que solo querían espantarlas, pero aún así, esa noche no rechazó la oferta de Sawyer y Callie para unir las camas y dormir juntas.
—No se reirán cuando sea el mejor de la clase. —Sam refutó sacándoles la lengua y subiendo un escalón extra para separarse de ellas. —Me se todos los signos: Aries, Tauro, Géminis, Cáncer, Leo...
—¿De qué hablas? —lo interrumpió Libby confundida. —¿Que tienen que ver los signos del zodíaco?
—¿Ves, Lib? Por eso me necesitan —Sam intentó darle palmaditas en la cabeza como harías a un perro, Libby le dio un manotazo en respuesta. —Los signos son la base de la astronomía, Aries es enérgico, los Cancer son muy emocionales y los Virgo suelen ser unos sabelotodos, ¿ese es tu signo?
Las tres niñas se lo quedaron viendo perplejas.
—¡Eso es astrología, no astronomía, tonto! —exclamó Libby, ofendida de que la había llamado sabelotodo. —¡La astronomía es sobre los planetas!
Sawyer soltó un bufido y Gemma rompió en risas, finalmente despertando. Ambos niños empezaron a alzar la voz, discutiendo quien tenía razón. Gemma no sabía quién hacía más ruido, si Libby y Sam o Sawyer y Gemma que casi estaban en el suelo riéndose. Eso hasta que la Profesora Stella Kane carraspeó tan fuerte que hizo saltar a los cuatro niños.
