Capitulo 8

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Cheng estaba en la entrada de su casa, a la par de la puerta para ser exactos. Estaba sentado, con las piernas flexionadas que abrazaba contra su pecho, a la vez que descansaba su frente contra sus rodillas. Llevaba probablemente 15 minutos así.

Una notificación en su teléfono hizo que encendiera la pantalla, lo miró, se levantó rápidamente y abrió la puerta.

Zhao y Liang estaban en frente de su puerta con pijama, somnolientos, con baba seca pegada en sus bocas y despeinados.

— Se puede saber ¿Por qué nos hiciste venir, a las 4 de la mañana? — Liang se frotaba los ojos pero su voz era seria — No me jodas Cheng, tenemos clases a las 8:00.

— Cuando te dije que estaríamos siempre para ti, no me refería a esto — Zhao habló esta vez mientras daba un largo bostezo — Tuvimos que caminar hasta acá.

— Viven frente a mi casa, no sean llorones — Cheng se hizo a un lado mientras los dejaba pasar — No hagan ruido, mis padres estan durmiendo.

— Eso deberías estar haciendo tu también, pedazo de aborto— habló ya más consciente Liang — ¿No tienes sueño acaso?

Cheng negó con la cabeza mientras al mismo tiempo hacia que sus amigos lo siguieran, subieron las escaleras y caminaron por el largo pasillo hasta llegar a la habitación del asiático. Ya adentro cerró la puerta con pestillo, los guío hasta su cama para obligarlos a sentarse mientras el estaba de pie frente a ellos.

— Necesito que me ayuden — Cheng comenzó a caminar en círculos por toda la habitación — ustedes han tenido pareja antes, así que saben de estas cosas.

— No me digas que ya terminaste con tu noviesito — Liang se lanzó en el colchón mientras cruzaba los brazos abajo de su cabeza — ¿Nos llamaste para consolarte?

— Pues para tu mala suerte, Dre y yo seguimos más felices que nunca — el asiático se detuvo, de pronto sintiéndose animado — Mañana el y yo cumplimos un mes de novios.

Zhao se levantó de golpe y comenzó a dar saltitos de felicidad, se acercó a Cheng y le dio palmaditas en la espalda con el propósito de felicitarlo.

— Pero que rápido pasa el tiempo, aunque extrañare corretearlo en la calle — comenzó a reír cuando vio una mala mirada de Cheng — Era broma, pero de verdad me alegra que ya lleven un mes,

— Si si, muy bonito todo y ¿eso qué tiene que ver con qué nos hallas llamado? — Liang preguntó mientras se sentaba de nueva cuenta en el blando colchón de la cama de su amigo — ¿no pudiste esperarte para más tarde?

— No podía esperar porque los recesos me la paso con Dre — Cheng respondió de lo más obvio — A lo que me refiero es, necesito que me den ideas para darle un regalo.

— ¿Por qué no buscaste en Internet? — cuestionó Zhao — yo la verdad no se mucho de regalos, siempre me terminaban antes del mes.

— Busqué de echo, pero no logro decidirme con nada — habló haciendo una mueca — por eso decidí consultarles a ustedes.

— Busca algo de los negocios de tu padre — Liang soltó desinteresado.

— Ya hice eso, pero esta vez quiero que sea diferente.

Zhao y Liang voltearon a verse pensativos ¿un buen regaló? era difícil pensar algo para darle a otro chico, normalmente a ellos ni siquiera les interesaban regalar algo a alguien.

Voltearon su vista a Cheng, parecía ansioso, era raro verlo así.

— No entiendo por que te rompes tanto la cabeza pensando — dijo Liang poniéndose de pie y jalando a Cheng para que se sentará con ellos — de seguro él ni siquiera te va dar nada.

CASILLERO EQUIVOCADO (ChengxDre) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora