Capitulo 10

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Dre vió por décima vez el reloj en la pared de la cocina, en 15 minutos iba a estar en el parque.

Salió de su casa a pasos lentos, vió el cielo, el atardecer estaba a punto de ser reemplazado por el cielo nocturno. Sentía dolor en el estómago y frío, nunca había estado tan nervioso, ni siquiera la veces en las que había sido golpeado por Cheng.

Oh

Cheng...

Al cruzar la calle divisó a lo lejos a un grupo de asiáticos, parecía que lo estaban señalando pero descartó la idea puesto que nunca los había visto.

Llevaba los brazos alrededor de sus codos y cuando estaba ya en el parque, se congeló. ¿Qué demonios estaba haciendo? Se mordió el labio y se dió la vuelta, quería regresar, no deseaba estar ahí. Sin embargo un paso bastó para volver a retomar su posición cuando el grupo de asiáticos qué había visto antes, se le acercó.

Estos lo rodearon y Dre solo se hizo hacia atrás, frunció el ceño ¿Quiénes eran? Escuchó como balbuceaban algunas palabras en chino hasta que uno de ellos se acercó, tenía el cabello con un peinado extraño.

- Al fin te veo - el chico comenzó a aplaudir burlesco y pareció inspeccionarlo - te ves tan débil.

- ¿Qué quieres? - preguntó nervioso, lo que menos quería ahora era que alguien lo molestara - Ni siquiera te conozco.

- Pero yo si te conozco a ti - Con una seña llamó a los otros 3 asiáticos qué rodeaban al moreno - el nuevo amigo de Lu.

Dre solo hizo una mueca confusa
- ¿Hablas de Cheng? - Escuchó la risa del contrario. - ¿Qué pretendes?

- ¿Yo? nada, solo pensé que estaría aquí, algunas veces los e visto muy juntos - metió sus manos en los bolsillos adoptando una posición relajada - necesitaba agradecerle, su retiro de la competencia regional me favorece.

Dre iba a preguntar a que se refería pero su voz fue detenida por una mano en su hombro, cuando levantó la vista se dio cuenta que era Cheng.

- Wu Ping, vete ahora. - Cheng habló serio y el otro solo sonrió.

- Cheng, siempre tan oportuno - sin decir alguna otra palabra, se dio la vuelta y se fué junto con su grupo.

Estando ya solo los dos, el de trenzas volvió a sentír ese malestar en el estómago. Era muy tarde para pensar las cosas y más aún cuando vio que el asiático traía en su brazo una gran caja. Ni siquiera quería preguntar que era porque lo suponía.

- ¿A que se refería con tu retiro de una competencia? - preguntó mirándolo a los ojos y el otro solo lo evitó - Cheng, mirame.

- No es nada importante, pero no hablemos de eso - de pronto su tono neutro fue cambiado a uno más animado extendiendole la caja frente a él - Se supone te lo daría mañana pero no aguantaba las ansias y aprovechando que nos veríamos ahora. Yo estoy tan feliz y des-.

Su voz se cortó abruptamente cuando Dre le empujó suavemente la caja.

- Y- yo... No puedo recibirlo.

- Puede que se vea muy grande pero te gustara lo que esta adentro, lo busque pensando en ti y-.

- ¡CHENG, NO LO QUIERO!

El grito de Dre hizo que todo el lugar se quedara en un profundo silencio, era una suerte que no habían personas de lo contrario hubieran ido a ver que sucedía. El asiático lo miraba inquieto.

- Dre...- su voz salió calmada, pero se notaba distorsionada -¿Qué fue eso?... ¿Estas enojado conmigo?

- Cheng... yo...yo lo e pensado y no puedo seguir con esto.

CASILLERO EQUIVOCADO (ChengxDre) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora