De vuelta a las tardes de estudio

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Era miércoles, y el comedor de la UA estaba lleno de estudiantes disfrutando de su almuerzo, charlando animadamente sobre clases, entrenamientos y todo lo demás que formaba parte de la vida cotidiana en la academia. Yo estaba sentada con mis amigos de siempre: Mina, Denki, Kirishima y Bakugo. La conversación giraba en torno a temas triviales, pero en mi mente, una decisión ya había tomado forma. Sabía que era el momento adecuado para compartir algo personal con ellos.

Respiré hondo, sintiendo un pequeño nudo de nerviosismo en el estómago. Aunque llevaba un tiempo conociendo a este grupo, compartir este tipo de detalles sobre mí siempre me resultaba un poco intimidante. Sin embargo, sabía que podía confiar en ellos.

- H-hay algo que me gustaría contarles.- Comencé, notando cómo todas las miradas se dirigían hacia mí, expectantes.

Mina, siempre tan atenta y curiosa, fue la primera en inclinarse un poco hacia adelante, mostrando un interés genuino.

- ¿Qué pasa, Hanae? - Preguntó, mientras Denki y Kirishima también dejaban de lado lo que estaban haciendo para prestarme atención.

- Bueno...- Hice una pausa, ordenando mis pensamientos.- Desde que decidí que quería entrar en la UA sigo una dieta especial. Es algo que hago para mantener un peso bajo y mantener una buena musculatura y así poder ser más ágil en los entornos de gravedad cero que genera mi quirk.

Observé cómo sus expresiones cambiaban de curiosidad a una mezcla de comprensión e interés. Sentí la necesidad de aclarar algunos detalles.

- Por eso, el día que fuimos al centro comercial, no tomé helado con ustedes. Y es también la razón por la que a veces mi almuerzo puede parecer un poco... diferente al de ustedes.- Agregué con una sonrisa tímida, recordando cómo me había sentido un poco incómoda aquel día en el centro comercial, viendo a todos disfrutar mientras yo me abstenía.

Kirishima asintió lentamente, comprendiendo mejor la situación.

- Eso tiene sentido.- Dijo.- Ser más ágil en gravedad cero debe ser súper importante para ti, especialmente en combates o situaciones de emergencia.

Denki, que a menudo era despreocupado pero siempre mostraba preocupación por sus amigos, añadió:

- ¿Es seguro, verdad? Quiero decir, ¿no es peligroso mantener un peso tan bajo?

Me apresuré a tranquilizarlo.

- Sí, totalmente. Esta dieta está controlada médicamente. Me aseguro de que estoy recibiendo todos los nutrientes que necesito para estar saludable y en forma. No es algo que haya decidido hacer de la nada. 

Miré a Bakugo de reojo, sabiendo que él ya conocía mi situación. Habíamos hablado de esto antes, en una de esas raras ocasiones en las que lograba cruzar la barrera de su usual actitud agresiva. Aunque su expresión seguía siendo neutral, pude notar que estaba satisfecho de que hubiera compartido esto con el grupo. No dijo nada, pero su silencio estaba lleno de esa aprobación silenciosa que había aprendido a interpretar con el tiempo.

Finalmente, Kirishima golpeó suavemente la mesa con el puño, sonriendo.

- Eres increíble, Hanae. Mantener esa disciplina no es fácil, pero es impresionante que lo hagas para mejorar tu quirk. ¡Eso es dedicación!

Sonreí, sintiéndome afortunada de tener amigos que me comprendían y apoyaban.

- Gracias, chicos. Realmente significa mucho que lo entiendan.- Respondí con sinceridad.

Con el peso de ese pequeño secreto ya compartido, la conversación en la mesa volvió a temas más ligeros, pero sentí que algo había cambiado. Había dado un paso más para abrirme a ellos, y eso me hacía sentir más cercana a mis amigos.

ᴀʀᴍᴀɢᴇᴅᴅᴏɴ ⋆.˚Bakugou Katsuki⋆.˚Donde viven las historias. Descúbrelo ahora