Open Arms

Ocho

Al día siguiente Valentina buscó a Juliana en su consultorio, pero ella se encontraba en una cirugía, al término de la jornada Juliana la fue a buscar, pero ahora era ella la que se encontraba en una cirugía, y así se fueron los días, hasta que el fin de semana Valentina decidió esperar a Juliana en el estacionamiento del hospital

-Valentina, ¿qué haces aquí?

-Te estoy esperando, necesitamos hablar

-Pensé que me estabas evitando

-no, así como tú, tuve una semana agitada, aunque también por un momento creí que me estabas evitando, pero vi el tablero de cirugías y toda la semana estuviste en el quirófano

-No te voy a mentir, ayer te vi en la cafetería y como pensé que estabas molesta conmigo decidí no acercarme

-No tengo porque estar molesta contigo, aunque no me hayas querido escuchar el otro día en la malquerida, entiendo que Johnny tiene un conflicto contigo, solo no quería que se hiciera más grande

-Lo siento

-Mira Juliana, estamos construyendo una bonita amistad y no quiero que, por la opinión del idiota troglodita del novio de Lucia, se termine

-Yo tampoco

-Entonces ...

-Entonces...

Se sonrieron las dos

-Hablaremos cuando tengamos que hacerlo y escucharemos cuando lo sea

-Si, de acuerdo

-Para reafirmar está amistad ¿qué te parece un pequeño viaje de fin de semana a la hacienda "Las Yeguas" al cumpleaños de mi sobrino Santi?

- Me parece perfecto

-Entonces en una hora pasó por ti, arreglas una pequeña maleta con unos dos cambios

-pero ¿porque tan pronto?

-Son tres horas de camino, así llegamos en la noche, dormimos y descansamos allá

-¿cuántos años cumple tu sobrino?

-no es necesario que lleves regalo

-un cumpleaños es sagrado

-se me hace que más bien quieres quedar bien con mi familia

-además de eso

-tres

-¿tres qué?

-qué cumple tres años

-aaah gracias, ¿algún gusto en particular?

-Los animales de granja le encantan

-Gracias, nos vemos al rato

Camino hacia la hacienda "las yeguas" Valentina manejaba, cuando recordó algo y le dio un codazo a Juliana

-Auch, ¿ahora que hice?

-me coqueteaste una vez en la malquerida

-¿yooo?-Juliana preguntaba poniéndose una mano en el pecho

-además de coqueta, infiel

-seré muchas cosas, menos infiel, ¿has tenido sexo casual?

-por ... ¿por qué me lo preguntas?

-tengo un punto

-Si, solo una vez y aunque fue muy buen sexo me di cuenta de que no es algo que quiero

-con las mujeres que he estado siempre les he dejado claro que solo busco sexo de una noche, no citas, no desayunos, no llamar después, no compromisos, y eso me ha funcionado durante los últimos 5 años, además te nos quedabas viendo de una manera que ahora que te conozco sé que es de curiosidad, que en ese momento pensé que querías un trio

-oyeeee- le pega en el brazo

-Auch- se sobo el brazo- que agresiva eres

Sonrió Valentina

-¿Has tenido alguna relación formal?

-Si, dos ¿y tú?

-Cuatro

-woow – levantó las cejas Juliana sorprendida

-y se puede saber ¿porque terminaron?

-en la primera estaba haciendo una especialidad en Alemania, ella es chef, llevábamos un año y le ofrecieron un trabajo en Francia, se decidió por su trabajo

-en la última, la conocí en unas vacaciones en Londres, ella es empresaria, llevábamos 6 meses y descubrí que estaba conmigo porque quería que mi papá invirtiera en su empresa, ¿y tú?

-la primera relación que tuve, fue ese primer amor, con el que haces los mil planes, con el que crees que te casarás y formarás una familia muy numerosa -sonrieron las dos- crecimos y nuestra forma de pensar cambió, yo seguía queriendo una familia numerosa como la mía, un príncipe azul pero también quería salvar vidas y él quería una ama de casa 24/7

-tiempo que no le ibas a poder dar

-así es, la segunda relación duró poco, más bien él me terminó porque no quería tener sexo, pero en ese tiempo no me sentía preparada

-la famosa prueba de amor

-si, la tercera duró un año, solo que descubrí que era un amor de condominio

-¿condominio?, ¿Cuál es esa?

-que tiene un amor en cada puerta

-aaah

- y la última, lo descubrí en la cama con otra, además que no pudo tolerar que el Dr. Alirio me contratará, les decía a los demás que aún no estaba preparada para ser jefa de pediatría, esto lo descubrí semanas después de terminar con él, pero en su momento me culpó por dedicarle más tiempo a mi profesión que a él

-qué idiota

-coincido contigo-sonrió Valentina

Valentina se detenía en un enorme portón, que tenía un letrero "Las Yeguas", suena el claxon de la camioneta y un señor de aproximadamente 50 años le abre

-Buenas noches, Anselmo

-Buenas noches, señorita Valentina

- ¿Cómo esta?

-Muy bien, señorita Valentina

-¿cómo está Chelito??

- con las pastillas que le recetó ya está mucho mejor

-que bien, mire le presentó a la Dra. Juliana Valdés, es mi invitada

-Buenas noches, Dra., Bienvenida

- buenas noches y muchas gracias

-Gracias Anselmo

Valentina arrancó la camioneta y se adentró a la enorme propiedad

-como dijo Anselmo, Bienvenida Dra. Valdés a la hacienda "Las Yeguas"- le sonrió Valentina