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Era un día normal como los otros. El invierno había llegado y una tenue lluvia de nieve apareció en el parque. Donde los dos niños, Megumi y __, jugaban alegremente como era costumbre. Los pequeños copos de nieve llenaron el cabello de ___. Era un bonito accesorio para el cabello sedoso de la pequeña. Megumi sopló un poco los copos que __ tenía en su cabeza, para después sacudir los restantes con su mano, despeinándola un poco. Ella rió entre dientes y él niño se sintió feliz al ver su sonrisa.
En eso, una figura alta y otra rubia se les acercaron. Claro, eran Gojo y Nanami que venían a recogerlos. Pero sus expresiones eran diferentes a las habituales. Nanami era mucho más sutil pero Gojo tenía su gran sonrisa en su rostro. Megumi arqueó una ceja, actuando curioso por sus expresiones.
— ¿Ahora que traman? —Preguntó Megumi, su tono estoico de siempre. Gojo solo se hizo el ajeno a ello mientras que Nanami continuaba mirándolos a los dos sin decir nada.— No dicen nada... eso significa que traman algo —Murmuro, lo último se lo susurro a __. Quien aunque llevara algunos meses con ellos los conocía lo suficiente como para saber que tramaban algo. Gojo soltó un suspiro de derrota y habló finalmente.
— Bien, bien, les diré, pero una vez que estemos adentro, hace frío —Dijo dándose la vuelta y haciéndole señas a Megumi para que lo siguiera. Nanami en cambio se acercó a __ y la cargó. No importa lo grande que ella estuviese, a él le gustaba cargarla y saber que estaba a salvo en sus brazos. Era un instinto paternal que no podía evitar.
Una vez dentro, en la habitación de Satoru. Megumi los esperó pacientemente, esperando una respuesta de su pregunta anterior.
— Bueno, iremos a Kioto! —Megumi arqueó una ceja, sus brazos cruzados como siempre.
— ¿Y eso que? —Respondió el peli azul.
— Pues nos dieron permiso de llevarlos —Contestó Nanami, quien aún con su tono frío tenía una pequeña sonrisa en su rostro.
— Como nunca han visitado Kioto, no saben lo que los espera —La curiosidad en __ empezó a surgir 'Lo que nos espera?' Se dijo a sí misma— Así que hagan sus maletas y nos iremos —Megumi inclino ligeramente la cabeza hacia un lado.
— ¿Y por que van a Kioto? —Satoru sonrió.
— Por un festival de intercambio, así que tendrán mucho tiempo solosss... —Dijo el albino, quien se acercó a el pequeño de pelo despeinado y comenzó a darle ligeros codazos, en signo de burla. Nanami negó rotundamente.
— Por supuesto que no, también estará Tsumiki —Gojo soltó un resoplido.
— Si, si, a eso me refería —Bufó. Volvió su vista a los niños y se inclinó hacia ellos, su gran sonrisa presente— Bien, en marcha, hagan sus maletas y nos iremos —Los dos pequeños se miraron y después a Satoru, __ fue la que corrió hacia la habitación de Nanami para hacer sus maletas mientras que Megumi solo se dio la vuelta y caminó tranquilo hacia donde estaba su ropa para empezar con la maleta.
