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Tsumiki corrió aterrorizada hacia ellos, Megumi se puso en frente de las pequeñas. Quedándose ligeramente perplejo al ver que las criaturas frente a él eran lo que Gojo le había enseñado. "Maldiciones" Pero esta una muy poderosa, Tsumiki tenía en su mano un anillo, __ notó que la energía en él era más poderosa de lo que podía expresar. Una criatura de debajo del suelo salió. Era perturbadora y desagradable.
— mMM... nIñOs... —Su voz era distorsionada y ronca. __ abrió los ojos con sorpresa. Colocó un campo de fuerza alrededor de ellos, lo suficiente amplio y resistente para que las criaturas no entraran. Pero rápidamente lo cundió el pánico. Megumi era el más tranquilo, pero aún su mente corría a mil por hora, buscando una posible solución. Tsumiki, estaba quieta, congelada, mirando con horror las criaturas al rededor de ellos, mirándolos con puro hambre y malas intenciones. __ era la más asustada, su campo de fuerza debilitándose por sus emociones. Megumi notó esto, le sujeto los hombros y la miró con determinación.
— Hey... saldremos de esto, no te preocupes, debe de haber una solución... —Murmuró, su voz suave y tranquilizante, parecía funcionar en ella, pero solo un poco. Las criaturas empezaron a expandirse, ejerciendo fuerza maldita contra el escudo de __. Agrietándose.
— N-no tengo la fuerza para hacer otro, hace frío... —Dijo __, temblando y queriendo llorar. A Megumi se le partió el corazón, viendo a su hermana y a __ tan aterrorizadas. Y él se supone que era el inteligente, el calmado, el que tenía todo bajo control. Y eso lo mataba.
[crack!]
Sonó. Las criaturas cayendo inmediatamente sobre ellos, __ cubrió a Megumi y a Tsumiki con un escudo. Su mirada determinada a que ninguno de los dos sufriera algún daño. Ahora ella quedándose afuera con las maldiciones.
— __! No hagas esto! —Dijo Megumi, golpeó el escudo desde dentro, pero era demasiado fuerte. Sus manos temblando de impotencia y desesperación. No quería que le pasara nada...
__ arrojaba campos de fuerza, pero eran delgados y pequeños, lo suficiente para hacerles daño por lo filosos que eran. Pero no podía aguantar mucho más, el frío la debilitaba y sus campos de fuerza eran más débiles.
Megumi apretó las manos con impotencia. Pero recordó algo. Su padre, por que justo en esta situación lo recordaba?
[Flashback]
Toji : Escucha mocoso, te quiero mantener lo más alejado posible de mi mundo. Pero si estarás con los Zenin tendrás que aprender de tu poder, o si no ellos te usarán como se les dé la gana.
El hombre azabache tronó su cuello y se frotó un poco sus bíceps.
Toji : bien, si quieres invocar a los perros divinos has esto.
El peli azul ladeó ligeramente la cabeza, era un niño pequeño, no entendía muy bien de lo que hablaba en realidad.
