No Hablamos, Quiero Escuchar Tu Corazón. [ZeniNezu]

Sentir

Zenitsu despertó después de que el abuelo lo llamo y regaño, se había quedado dormido, su alarma que tenia programada sonó y sonó, pero por mas que sonara este jamás logro escucharla gracias al cansancio.

¿Porque?

Bueno, simplemente porque el joven Agatsuma se la paso las noches seguidas viendo videos e incluso tratar de entender todo mediante paginas de internet para aprender lenguaje de señas , todo para poder comunicarse con la hermosísima Nezuko.

Zenitsu tomo un rápido desayuno mientras aun miraba curioso en una pagina donde se daban algunas clases, Esperando que tanto desvelo de anoche sirviera de algo.

Mientras Kagaku lo observaba con curiosidad mirando en momentos como su hermanastro no se despegaba del teléfono. Volteo de reojo al hombre mayor que se encontraba a su lado desayunando con tranquilidad.

—Oye viejo... Dime, que le pasa?

Dijo el pelinegro en susurro y señalando con la cabeza al rubio que estaba frente a el.
El viejo solo dejo su desayuno para prestar atención a ambos jóvenes que le acompañaban. Se centro un momento en Zenitsu y sonrió para al final mirar solamente a Kangaku.

—Tiene unos días así. Pero no pregunto al respecto.. Solo agradezco eso ya que Zenitsu a estado de buen humor últimamente.

Dijo solamente eso con un tono tranquilo mientas tomaba la taza de café que tenia frente a el.

—Hum... Ya veo. Bueno me voy. Gracias por el desayuno.. Regresare tarde hoy
—Solo pediré que te cuides.

Dijo eso ultimo el viejo mientras Zenitsu solo levanto la mirada un momento para ver a su hermanastro levantarse y salir finalmente de la casa.

No se percato que el abuelo se levanto y rápidamente le dio un ligero golpecito sobre la cabeza.

—¡Y tu, Ya es tarde, anda; Tu eres el que debe estar ahí por ser el nieto del dueño del café!

Grito mientras Zenitsu se cubría el área golpeada que recibió mientras hacia un ligero puchero.
Quería hablar y decir algo al respecto pero fue callado por su abuelo que se apresuro a hablar.

—Ya déjalo así, anda ya ve. Quien se supone que abre el café eres tu, ¿no?

Zenitsu permaneció callado y miro con preocupación a su abuelo fingiendo una sonrisa y se encogía de hombros, mientras sentía como sus manos temblaban un poco.

¿Como le diría que le dejo ese trabajo a alguien mas?

Pareció que el abuelo puedo leerle la mente porque en ese momento, con solo ver la cara de zenitsu este se cruzo de brazos y negó con la cabeza.

—¡¿Dejaste a Inosuke encargado de abrir el café Zenitsu?!

Incluso el abuelo sabía las locuras y de lo que era capaz Inosuke, a pesar de agradarle aquel joven no le dejaría ese cargo aún.

Zenitsu solo se encogió sobre su asiento y negó con la cabeza.

—No a Inosuke..
—¿Que?, ¿Como  que no? ¿Entonces quien Zenitsu?

El rubio aun con nervios, ya que sabia que el abuelo le llamaría la atención, sabia que algo le diría, desde el inicio sabia que eso no era lo correcto pero no pudo negarlo.