Reencarne en Navier

Es difícil ser Navier

-¿Piensan que el ave volverá a visitarme?-dije sonriendo.

-¡Espero que sí, y con otra carta-dijo Laura alegre.

-ya estoy deseando que vuelva-dije.

-¡Ahh! ¡Se me acelera el corazón de tanta emoción!, ¡¿De quien será esa ave?!-dijo Laura.

-¿Su majestad?-dije.

-Ah, al fin regresa, emperatriz-dijo.

-¿En que puedo ayudarle?

-Creo que rashta necesitará una dama de compañía propia, pero no ha sido fácil hallar una noble que esté dispuesta.

El día era perfecto, pero ahora ya entiendo a navier.

-Con todo respeto, Majestad, he cumplido fielmente con mis deberes como Emperatriz y no me corresponde rebajarme a buscar compañía para quien ha usurpado mi lugar en su vida. La dama de compañía que usted desea ya se encuentra bajo su techo, no soy yo la que necesita ser reemplazada.

-Te éstoy dando una orden navier, pero eres alguien tan celosa y insensible ¡No puedes ser más cómo ella! y ¡Rashta es la mujer que amó no una sirvienta!

- acepto, pero ¡Si eso es lo que considera amor, entonces me alegra no ser como Rashta!. Prefiero ser celosa y insensible, como usted dice, antes que conformarme con ser una sombra que solo brilla cuando su reflejo lo permite. Si prefiere a Rashta, lo respeto, pero no se equivoque, su elección no define mi valor ni mi dignidad como Emperatriz y ya puedes retirarse.

-tsk, cuento contigo.

Quien se cree, pero lo peor es que me siento mal y es porque el cuerpo de Navier se siente mal, pero yo no.

-¿En verdad debe buscar una dama de compañía para esa mujer?

-¿Por qué? Hasta los secretarios del emperador se han rendido-dijo la condesa Eliza.

-Odio esto, pero eso es lo que quiere-dije.

-¡¿Por qué debe la emperatriz encargarse de buscar una dama de compañía para una mera amante?!-dijo Eliza.

-Por favor, inviten a todas las nobles y sus hijas a tomar el té -dije.

...

-Gracias por la invitación. Hace mucho que no nos veíamos, y usted está tan bella cómo siempre, su majestad.

-¡Coincido!¿Y a qué debemos el placer de su invitación a este magnífico té?

-Son todas muy amables. Las invité aquí porque necesito su ayuda -dije.

-Vaya. ¿Ayuda?.

-¡Lo que necesite, su majestad!

-El emperador busca una dama de compañía para atender a quién pronto será su amante¿Alguna estará dispuesta a ser su dama de compañía?-dije.

Todas se callaron se notaba qué no

-Eh, habla de lady rashta.

-La verdad es que últimamente todos han estado hablando de ella y que es una esclava fugitiva.

-Ya me resultaría difícil ser la dama de compañía de una plebeya, ni hablar de una esclava fugitiva.

-Moriría de vergüenza si tuviera que ser la dama de compañía de una esclava.

...

Que hagotador es buscar a alguien para rashta.

-¿Le preparo un baño para relajarse? ¿O prefieres dar un paseo? Quizás nos encontramos con el ave que vimos la u...eh-dijo Laura.