El sargento Jung [Finalizada]

¡Yoon sigue triste!

Cuando regresaron al día siguiente por la mañana Namjoon pidió a Jin y Yoongi que se adelantaran porque quería hablar con el Sargento y Cabo.

Los dos se quedaron viendo al piso, sabían que habían hecho mal y recibirían un regaño por parte de Namjoon tal vez no como superior pero sí como amigo.

— Deberían cuidar más a Yoon. Sé que es una relación de tres la que llevan pero él no se está sintiendo incluido en ella, Yoon es una persona que necesita mucho cuidado y amor. Él hace todo para cuidarlos a ustedes y ustedes no están dando lo mejor para hacer lo mismo. – dijo con voz severa.

Aquel no era el tipo de regaño que esperaban y los había sorprendido. Aún así lo único que pudieron hacer fue pedir disculpas y prometer que harían un mayor esfuerzo.

Fue por eso que aquella noche en vez de ser pequeños... Decidieron concentrarse en su novio.

Jungkook se había sentado en sus piernas y le había dado muchos besitos tiernos para después acomodarse en su pecho. Yoon había acariciado su cabello y sonreído, siempre olvidaba que el Cabo era el más chico de los tres.

Hobi se había acercado a aquella escena y dado también un beso a Yoon y recargado en su hombro. Y aquello fue todo para romper la fachada del Teniente, había comenzado a hipar levente hasta que las lágrimas salieron a mares.

No había sentido que tanto le dolía la vida hasta ese momento en el que recibió tanto amor.

— Me duele mucho... – dijo sollozando
— No puedo darles mucho de mí... Porque estoy tan roto... Me odio tanto...

Jungkook y Hoseok lo abrazaron lo más fuerte que pudieron, como si en ese momento pudiera deshacerse y quedar puro polvo o se convirtiera en vidrio roto. Y abrazarlo era una forma de mantenerlo completo, unido.

Una vez que Yoon se calmó un poco Hobi fue quien rompió el silencio.

— Yoon... Yo sé que el amor... No puede solucionar lo que te pasó, mi amor. Pero, puedes encontrar un apoyo en nosotros. Nosotros realmente te amamos demasiado, no te vamos a dejar – le dijo dándole un beso en la frente.

— Sí, yo realmente quiero seguir contigo sin importar tu pasado, Yoon... Me gusta estar con los dos – siguió Kook.

— Estuve un poco celoso de ustedes... Tienen una experiencia juntos que tal vez nunca podré tener... Incluso si pudiera superarlo... No sé si podría mostrarles... – dejó la última oración incompleta.

Lo único que pasaba en ese momento por la cabeza de Yoongi eran sus multiples cortadas, quemaduras y demás que adornaban su estómago y piernas. La única razón por la que no sabían nada de ello dentro de la milicia era gracias a Namjoon que le había conseguido un doctor con contrato de confidencialidad para hacer sus chequeos médicos.

— Yo también siento una gran conexión contigo, Yoon. No importa que no hayamos tenido sexo, siento que el simple hecho de que me cuides hace nuestra relación de lo más especial – confesó Jungkook.

— Yo siento lo mismo... Me has aceptado tal y como soy desde el principio, yo te metí en este lío de cuidar Littles – Hoseok rio al recordar la primera vez que aquel Teniente había tenido que cuidarlo — Y eso lo hace lindo y especial. No es necesario el sexo... Y si algún día quieres intentarlo también podemos hacerlo. Pero jamás haremos algo que no quieres.

De cierta forma aquello hizo sentir seguro a Yoongi y pudo sonreír entre las lágrimas.

— Gracias... A los dos por estar conmigo aunque tenga estos tontos días... – dijo abrazándolos.

— Es parte del amor, ¿cierto, Kook? – dijo Hoseok.

— Muy cierto, Hobi – aseguró.

Y así la noche continuó lleno de mimos y cariño para el Teniente Min Yoongi.