+18 Un Pacto (BORRADOR)

Capítulo 4 y 5

Briana

Faltan 7 putos días para el 12 de marzo, fecha en la cual me casaré, con el maldito moja bragas.

Ya han pasado como dos meses, en los cuales no lo he visto, uno o dos veces como máximo. Aparte de que también he estado preparando la boda.

Aunque lo único que hago es decir sí o no a las opciones que me da Violet.

Y pues básicamente un día después de haberme comprometido "oficialmente", el moja bragas me presentó a Diana, mi guardaespalda, y en ese preciso momento entró el

hermano de Violet, el cual es por supuesto, hijo del Don de la mafia de Estados Unidos, por lo cual no es extraño que Violet no se halla alterado cuando un día después en mi supuesta habitación le comenté todo lo que pasó.

Mi mejor amiga dio saltos de alegría, y en la tarde ya tenía un montón de revistas, pero por supuesto ella se encargó de buscarme las opciones que más me gustaban, las cuales yo elegía a cual prefería. Y mi querido futuro esposo lo único que dijo es que el pagaba la boda, de todo lo demás me encargaba yo, ya que tenía suficiente tiempo.

De lo único que si quise hacer yo solita fue de el vestido de novia o mejor dicho, de los vestidos de novia, ya que voy a tener dos, uno para la ceremonia en la catedral y otro para el salón, nadie, pero nadie sabe cómo son, ya que es una sorpresa, sobre todo el segundo, que estoy ansiando, ponerme lo ya, sobre todo para que lo vea el.

🩸🩸🩸🩸

Ya mañana tendré según mi mejor amiga el privilegio de casarme con el hombre más rico, más guapo y mas poderoso de Rusia.

A mi nunca me gustó nada de eso, es verdad que es guapo, rico y poderoso, pero yo no quiero casarme solo por un maldito pacto que acordaron nuestras familias cuando éramos pequeños, para terminar la guerra entre ellos.

En estos momentos me encuentro sentada en un bar, alquilado por Violet despidiéndose de mi soltería.

Hace apenas dos meses estaba en New York, llendo a la universidad por la mañana, por las noches trabajaba, y en mi tiempo libre la pasaba con Violet o Diego. Me duele el corazón de solo acordarme de este último, le entregué mi corazón e incluso mi virginidad, y me pagó acostándose con la persona que más odiaba de la universidad.

Ahora estoy lejos de allí, a muchas horas de viaje, por lo que él no me puede hallar, y de lo único bueno que he sacado de Rusia, es que no lo podría ver ni a él ni a ella.

Porque la espina todavía está en mi corazón.

-Deja de ser ya tan aguafiestas y ven a divertirte- viene Violet a donde estoy sentada, resigna ya de todo voy con ella. Porque si me quedo sentada ahí mi mente me va a traicionar, y que mejor cosa para desconectarme. Pues el baile, es mi pasión y cada vez que lo hago, es como si estuviera en otra dimensión, yo sola bailando, y pues una buena bebida no puede faltar.

Tres horas después, estoy caminando junto con una Violet, bien borracha, que ni siquiera es capaz de orientarse, aunque yo no estoy lejos de estar como ella.

Pero, la suerte nos acompaña ya que tenemos a Diana, y una camioneta (de seguridad) llena de hombres bien fuertes, no tanto como el moja bragas, pero si los suficientes para cargarnos.