El Cumbucket de mi hijo Parte 6

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Me desperté con la alarma sonando. La había programado una hora antes de que Rich y Jack se levantaran normalmente para ir a trabajar y a la escuela. Haciendo el menor ruido posible, me levanté de la cama y bajé a rastras hasta la habitación de Jack. Busqué a tientas la cama de Jack y me metí detrás de él. Se movió y gimió un poco cuando me apreté contra él. Miré a mi alrededor y encontré su entrepierna. Metí la mano en su ropa interior y encontré su pene flácido. Era increíblemente pequeño, no solo en comparación con lo grande que se pone cuando está completamente erecto. Empecé a acariciarlo suavemente hasta que se puso cada vez más duro. Jack se despertó sobresaltado y se dio la vuelta sorprendido de encontrarme en su cama.

- ¿Qué haces aquí? - susurró fuerte y roncamente.

"Bueno, pensé que debería bajar temprano y hacer algunos negocios para que no tengas que correr al baño durante la clase", le susurré en respuesta, mi rostro ahora a centímetros del suyo.

La polla de Jack ahora estaba dura y empujando mi estómago, lo acaricié con la mano.

"A menos, por supuesto, que quieras que me vaya y puedas estar solo todo el día", solté mi mano y fui a rodar, pero Jack me envolvió con sus grandes y fuertes brazos.

-No, por favor. Me sorprendió verte tan temprano.

—Bueno, aquí estoy —dije y salté cuando sentí los dedos de Jack explorando mi coño.

La otra mano de Jack se colocó sobre mi boca para silenciarme. Al recuperarme, tiré de su mano hacia abajo, pero tuve una idea mejor. Tiré de su mano hacia mi garganta y él envolvió sus dedos alrededor de mi cuello.

—No puedo gritar si no puedo respirar —le susurré al oído.

Acostarme con él podría haber sido un error porque cuando se movió para conseguir un mejor ángulo en mi garganta, su polla dura me estaba empujando hacia abajo. Apretó mi garganta mientras yo acariciaba su polla. Sus dedos encontraron su camino hacia mi coño mojado e inmediatamente comenzó a tocar mi punto G. Dejé escapar un pequeño gemido y él apretó aún más alrededor de mi cuello. Sentí que mis labios comenzaban a hormiguear y aparté su mano para poder respirar un poco. Él disminuyó la velocidad de sus dedos y yo acaricié tan rápido como pude.

"Siéntate aquí encima de mí, puedes follarme las tus tetas", me ordenó.

Jack se quitó las mantas de encima y me acosté boca arriba. Se sentó a horcajadas sobre mi pecho y apreté su pene entre mis pechos. Era tan pesado que me costaba respirar, pero al ver cómo su pene se deslizaba hacia mí, saqué la lengua y dejé que la cabeza de su pene tocara la punta de mi lengua.

Después de unas cuantas embestidas como esa, Jack se deslizó por mi cuerpo hasta quedar acostado sobre mí. Nuestras caras estaban a menos de una pulgada de distancia y nos miramos el uno al otro por un instante y luego presionó sus labios contra los míos y yo presioné los míos contra los suyos. Le chupé la polla, pero lo besé, justo ahora, me sentí muy mal.

Mis piernas se abrieron para liberar un poco de su peso y su polla ahora estaba presionada firmemente contra mi coño expuesto. Jack soltó el beso y levantó mis brazos por encima de mi cabeza y los sujetó con fuerza. Ahora estaba indefensa cuando comenzó a empujar su cadera dentro de mí. Me iba a follar aquí mismo, ahora mismo. Mi corazón latía con fuerza y ​​mi cabeza daba vueltas. No podía creer que esto estuviera sucediendo. Sentí la cabeza de su polla empujando dentro de mí. Me dolió un poco y estaba dolorida. Jack se detuvo y consiguió un mejor ángulo. Lo intentó de nuevo, pero simplemente no salió.

Tomándolo como una señal, llamé la atención de Jack: "Jack, detente. No podemos hacer eso".

Jack se detuvo y me soltó los brazos. Me aparté de él y me quedé de pie sobre él. Mi corazón todavía late fuerte.

El Cumbucket de mi hijoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora