4 de diciembre 2023
Cassandra's Pov
2:45 am
Escuchaba unos toques fuertes en la puerta de mi habitación junto con su voz llamando mi nombre o mejor dicho gritándolo, exigiendo que la dejara entrar. Mi cuerpo estaba petrificado en la cama tratando de ignorar los ruidos, pidiendo que por favor parara, que no siguiera aquí, yo ya no era de su "propiedad". Estaba aterrada, con un miedo que nunca había sentido, era como si todos estos sentimientos que había reprimido durante nuestra relación estuvieran saliendo a flote. Me sentía tan pequeña y tan frágil que la sabana que se encontraba sobre mi la utilizaba como protección. Temía por mi seguridad, sabia que ella iba a regresar por mi, ella siempre creyó tener un poder sobre mi, desde antes de ser novias cuando solo éramos amigas nada mas, siempre fue posesiva conmigo, me celaba con los demás.
En esos tiempos lo veía como su forma de demostrar que le importaba, claro que no lo veía como algo perturbador, estaba completamente enamorada pero aun lo tenia en secreto. No sabia lo equivocada que estaba, lo que me esperaba en un futuro, los golpes, las cicatrices, las agresiones verbales entre muchas cosas que odiaba recordar porque me avergonzaba admitir que todo sucedió por mi culpa.
Un sonido ensordecedor se hizo escuchar sacándome de mis pensamientos y al mirar un poco vi que había abierto la puerta de una patada y entro a la habitación mirándome como su presa, sabia lo que quería y estaba cansada de que me forzara a hacer algo que muchas veces le decía que no. Para ella mi no era como si no importara, mis suplicas mientras ella lo hacia eran en vano y siempre terminaba cediendo o mejor dicho rindiéndome y solo pidiendo que acabara y se fuera.
Se acerco a la cama y tomo mis manos a la fuerza para que yo no pudiera moverme. Era horrible la impotencia que sentía en estos momentos, su fuerza contra la mia era nula, mis ojos se comenzaron a humedecer y repetía que no quería hacerlo, que por favor me dejara en paz.
Abrí los ojos de inmediato y mi respiración estaba completamente agitada, mire a mi alrededor y note que me encontraba en mi habitación sola. No había nadie, Flor no estaba aquí no podía hacerme mas daño, un alivio recorrió mi cuerpo. No sabia el daño psicológico que Flor había causado en mi, esos sueños eran recurrentes y el miedo como ya había mencionado seguía presente. Flor me había metido a una oscuridad que yo misma le ayude a encontrar. Me había destruido como persona y no me creía capaz de dejar entrar a una persona nueva a mi vida. No era yo y odiaba darme cuenta de eso, no sabia lo que era que me quisieran realmente.
Me levante levemente de la cama y salí al pasillo para ir a la cocina a hacerme un té para calmar mis nervios. Pensé en si debería llamar a mi hermano, tenia que ser honesta con el sobre algunas cosas que sucedieron con Flor, tenia que sacarme esta tortura de encima.
Saque mi teléfono y le mande varios mensajes a los cuales respondió unos minutos mas tarde que venia al apartamento. En lo que llegaba comencé a calentar el agua y sacar el té que iba a utilizar. Lleve mi vista al balcón y me di cuenta que estaba lloviendo, lluvia chocaba contra las ventanas y los relámpagos comenzaban a iluminar la sala. Me quede viendo afuera un buen rato hasta oír la puerta abrirse dejando ver a un Adriano medio dormido entrar y sentarse en una de las sillas de la barra.
— lamento haberte despertado a esta hora — hable mientras colocaba una taza y la llenaba de agua caliente — tuve el peor sueño desde lo de Flor — le di la bolsita de té junto con el frasco de azúcar y miel —
— ¿que soñaste? — pregunto acercando su taza y el té para prepararlo —
— no te he sido honesta sobre todas las cosas que Flor me ha hecho — confesé mientras yo preparaba mi té —
