El tiempo pasaba y los padres notaban el crecimiento de sus hijos.
La gente de Regina Morgan encontraron la mansión en donde vivian ellos.
-Le haremos una visita.
Ella tenía en sus brazos a la bebé que dió a luz Rachel. La niña ya tenía 9 meses de nacida.
-Si Christopher no nos invito a su casa, ¿para qué iremos?
Reece preguntó mientras sostenía a su bebé.
-Eso es porque de seguro la arpía de su esposa no le permitió.
-¿En serio, mamá? Es Christopher, él no hace lo que los demás le dicen.
-Esta todo listo, vámonos.
La élite también quería ir a visitar a su ministro.
Todos se subieron en sus autos y siguieron a los Morgan.
...
Christopher cambió con habilidad el pañal de su hijo.
-Estan más grande.
Gema cambió el pañal de su bebé con cuidado.
-Pasa rápido el tiempo.
-Seis meses pasan rápido.
Los gemelos tenían seis meses de nacido.
Eran blancos y regordetes. Christopher siempre tocaba las mejillas de los niños y Gema los besaba a cada rato.
-Vamos, mami les dara de comer.
Ellos fueron a la sala y se sentaron juntos.
Gema se subio la remera y Junior se prendó al pezon de ella.
Christopher tenía un biberon en su mano y le dió de beber ese a John.
Los niños miraban directamente los ojos de sus padres como si eso fuera una cosa interesante.
-Esta rico, ¿verdad?
Christopher se burló de los niños.
-Chris.
-¿Qué? Yo solo digo.
Él también probó la leche despues de todo.
Christopher y Gema se observaron y sonrieron, se acercaron y rozaron sus narices.
-Te quiero de nuevo esta noche.
-¿No te cansas?
-No.
-Esta bien.
Christopher sonrió en grande y luego besó a Gema.
Sin ellos saber, afuera llegaban las visitas.
Ellos quedaron sin aliento al ver la mansión desde afuera.
-Él sí que la tiene en un buen lugar.
-Con razón no quiere salir.
Rachel observó todo con enojo.
Eso debería haber sido suyo, desde Christopher hasta la mansión.
Alex se bajó y habló con un guardia que estaba en el portón.
-Lo lamento, no pueden pasar.
-Soy el padre de Christopher, dile que me deje entrar.
-Espere un momento.
El guardia habló por el comunicador y luego esperó.
-Señor, señora.
