꧁𝐋𝐨𝐯𝐞 𝐦𝐞 𝐡𝐚𝐫𝐝𝐞𝐫꧂ 𝐂𝐚𝐫𝐚 𝐖𝐚𝐫𝐝 ♡︎

capítulo 2- caso cerrado

-¿Qué ha sido eso?- preguntó Connor.

-¿El qué?- dijo Pip.

-Le digo a Cara.

El joven dirigió sus ojos a la morena. Los demás se quedaron en silencio. Un silencio un poco incómodo.

-No seas pesado. Además, parecías tonto.- comentó Cara.

-Bueno venga, basta de malos rollos.- dijo Zach.

Los demás asintieron con la cabeza. Siguieron su camino comentando cosas como "planes para este verano" o qué cosas interesantes harían. La más popular de entre los 5 jóvenes fue dormir 12 horas. Pero una de ellas, Pip, no estaba escuchando absolutamente de la conversación. Seguía centrada en su EPQ.
Los chicos llegaron cerca de la casa de los Bell y de los Robinson. Zach, Connor, Lauren y Cara se marcharon, mientras que Pip se quedó quieta observando el mural de Andie Bell.
Ella al igual que Jane, conocía a Sal y sabía que era prácticamente imposible que él hubiera hecho algo tan siniestro como matar a su novia para después suicidarse.

La noche en la que Andie desapareció, Pip vio a ambos en el instituto, tanto a Andie como a Sal.
Ese recuerdo se apoderó de la cabeza de la chica.

La pequeña Pip se encontraba en taquilla, guardando y sacando libros. Mientras ella hacía eso, vio a Andie pasar por el pasillo, justo detrás de ella. Pero era raro. Andie llevaba el rímel corrido, como si hubiera llorado. Antes de entrar en una sala del instituto, Andie miró a la pequeña Pip. Esta, le devolvió la mirada y Andie le hizo una señal, queriendo decir que, por favor, no le dijera a nadie donde se había metido. Por último, Andie entró en la sala.

Pip volvió a la realidad y emprendió el camino a su casa.

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Mientras tanto, Jane se dirigió al supermercado para comprar algunas cosas. Por si no lo parecía, a Ravi también le encantaba comer. El móvil de la rubia empezó a sonar.

-¿Qué pasa ahora Ravi?

-¿Cuánto te queda? Estoy hambriento, y creo que Simba también.

Se pudieron escuchar unos maullidos desde el móvil de su mejor amigo.

-¿Quieres nubes de azúcar no?

-Como me conoces Robinson.

Jane puso los ojos en blanco.

-Te conozco tanto que seguro que ahora mismo estás con una sonrisa de oreja a oreja.

-Correcto, señorita. Otro punto para tí.

-Que buena soy.- dijo victoriosa.

Después de unos 20 minutos, Jane pagó la compra y fue a su casa. Ahora mismo se encontraba otra vez con Ravi, y su gatito, Simba.

-¿Y por qué has tardado tanto en ir a comprar?- comentó Ravi con la boca llena de nubes de azúcar, casi ni se le entendía.

Jane solo pudo reírse.

-¿Qué es tan gracioso?- preguntó Ravi, sin saber lo que pasaba.

Jane no podía parar de reírse. No se le entendía ni la mitad de cosas que decía.

-Nada, es que no se te entiende con tantas nubes de azúcar en la boca. Bueno, he tardado porque me he encontrado con Cara Ward y sus am-