CAMBIO -「Last Embryo」

Prólogo

Prólogo

—Mmm... tu nombre me resulta gracioso.

—Eh, no veo en donde mi nombre es gracioso, Senji-san.

—Te llamas Masachika... supongo que tu percepción japonesa no te permite ver lo gracioso de tu nombre, de seguro en el futuro si ves tu nombre en otro idioma entenderás porque me resulta gracioso.

Suspiro. —Así que tendré que aprender otro idioma para ver que mi nombre es gracioso... no quiero.

—Supongo que es buena decisión, Masachika.

"Enserio resulta gracioso."

—¡Te vi sonreír como si te burlaras de mi nombre! —Masachika se enojó levantando los puños con intención de golpear a Senji.

Senji levanto ambos brazos en señal de rendición.

—Mi error, prometo que no me burlare de tu nombre, Masachika.

Sus acciones lo traicionaron.

—¡Senji-san tu boca se torció! —Masachika golpeo en la boca de Senji. Luego se abalanzo para derribarlo y continuando golpearlo en el suelo.

"Mierda, enserio no pude controlar mi boca."

Senji no intento en defenderse y solo recibió los golpes de Masachika, pero luego de algunos minutos se detuvo al sentir la sangre caliente en sus puños.

Los ojos de Masachika se abrieron en shock, miraba horrorizado sus manos manchados de sangre y luego miro a Senji ensangrentado de su propia sangre, fue su culpa de dejarlo así con sus propias manos.

—No-No-No ¡No quería hacer esto! —Lagrimas empezaron a caer, donde Senji tuvo que moverse rápido para controlar la situación, Masachika había empezado hiperventilar.

"Maldición, ahora apareció otro problema."

—¡Cálmate y respira hondo! —Senji le dio un par de golpes de la mejilla para que reaccionara.

Los golpes leves de Senji ayudaron a Masachika donde empezó a tranquilizarse.

"Se encuentra bien Senji-san, se encuentra bien Senji-san, se encuentra bien Senji-san... pero eso no cambia que fue mi culpa."

La culpa carcomía la mente de Masachika.

—Maldición, en donde estará tu novia cuando se la necesita.

Las palabras de Senji alteraron a Masachika.

—¡ELLA NO ES MI NOVIA!

Un fuerte grito de Masachika casi dejaba sordo a Senji.

—Tsk, si puedes gritar de esa forma entonces ya te encuentras bien.

Senji se quejó por el dolor de tímpano.

—¡Tu comenzaste!

—Si, sí. Es mi culpa, pero ya debes calmarte.

—¡Pero Masha no es mi--!

—¡Masachika, Senji-san!

Senji vio como Masachika se sobresaltaba por la aparición de una niña que rondaba con las mismas edades que tenían.

—Jeje, decías.

Senji se burló de Masachika.

—¡Si serás...!

Masachika se contuvo de golpear devuelta a Senji, pero su mente lo atormentaba por lo que había pasado hace unos minutos.

La niña llamada Masha miraba confundida a Senji, tenía sangre en su ropa.