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Sophie sintió una mezcla de alivio y agotamiento cuando la tormenta finalmente comenzó a ceder. El rugido ensordecedor del viento y el tamborileo de la lluvia dieron paso a un silencio cargado de expectativa. El aire estaba fresco, con un ligero aroma a ozono y tierra mojada. A su lado, Tyler permanecía en silencio, observando el horizonte mientras las nubes comenzaban a dispersarse desde el asiento del copiloto.
"Fue intenso."
Comentó Sophie, intentando romper la tensión que sentía en el aire. Su voz sonó más calmada de lo que se sentía por dentro.
"Pensé que no íbamos a poder con ello por un momento."
Tyler asintió desde su lugar, aún con la mirada fija en la distancia.
"Hubo momentos difíciles, pero lo logramos. El equipo hizo un buen trabajo, y tú también."
"Gracias."
Respondió Sophie, sintiendo un calor inesperado en sus mejillas. Era raro recibir cumplidos de Tyler, que normalmente era más reservado.
"Creo que estamos empezando a encontrar nuestro ritmo."
Tyler la miró por primera vez desde que la tormenta había pasado, sus ojos brevemente encontrándose con los de ella antes de apartarse de nuevo.
"Sí, creo que sí."
Hubo un silencio entre ellos, pero no era incómodo. Era como si ambos estuvieran procesando lo que acababan de vivir. Había algo en la forma en que Tyler se había mantenido cerca de ella durante la tormenta, en la manera en que sus acciones habían reflejado un instinto de protección, pero Sophie no quería leer demasiado en ello. No era el momento, y no estaba segura de querer hacerlo.
Tyler se pasó una mano por el cabello mojado, y Sophie no pudo evitar notar cómo las gotas de agua caían por su cuello, pero rápidamente desvió la mirada. Se reprendió a sí misma por distraerse con algo tan trivial.
"Deberíamos reunir al equipo y asegurarnos de que todos estén bien,"
Dijo Tyler, rompiendo el silencio.
Sophie asintió mientras giraba la llave de encendido.
"Sí, claro. Hay que asegurarnos de que no haya problemas antes de regresar."
Mientras Sophie conducía para supervisar las tareas de los demás, Tyler se quedó callado, mirando por la ventana con una expresión reflexiva. Sophie sintió una ligera tensión en el pecho, como si hubiera algo no dicho entre ellos. Pero lo dejó pasar, enfocándose en su trabajo. Había mucho que hacer, y no era momento de distraerse.
Tyler también parecía más distante de lo usual, aunque sus acciones mostraban la misma eficiencia de siempre. Aun así, Sophie no pudo evitar sentir que había un ligero cambio en la dinámica entre ellos, algo apenas perceptible que ella no sabía cómo definir.
