Para Jungkook ser Cabo seguía siendo difícil, sentía que nadie le hacía caso y a pesar de lo que habían dicho Yoon y Hobi los rumores seguían de que su padre era el que lo había subido de rango.
Era raro que los altos mandos fueran a supervisar a alguien como un simple Cabo pero podía pasar de vez en cuando y justo aquel día había ido el Jefe de Brigada Jeon a verlo...
Se había puesto tenso ante su presencia y uno de los soldados había soltado una especie de bufido burlón.
— Y dice que su padre no lo subió de rango... – dijo lo suficientemente fuerte para que todos escucharan.
Pero nadie rio ni dijo nada, todos sabían los rumores respecto al Jefe de Brigada y preferían pasar desapercibidos por él.
— Soldado, venga aquí – ordenó firme pero con voz calma.
Aquel chico fue despreocupado frente a aquel hombre imponente.
— ¿Está usted diciendo que usted sería mejor Cabo? – preguntó ahora con seriedad.
— Sí, señor. No entiendo porqué Jeon Jungkook fue escogido para ser Cabo si no es mejor que nosotros – aseguró creyendo sus palabras.
— ¿Alguien más piensa lo mismo? – dijo el Jefe de Brigada alzando la voz para que todos pudieran escucharlo.
Pero nadie asintió incluso cuando todos pensaban eso.
— Cabo, ¿por qué sus soldados están hablando a sus espaldas? – dijo ahora directo a Jungkook.
— Lo lamento, señor. No he sabido disciplinar bien a los soldados y hacer que sigan mis ordenes. Es mi culpa por aún no acoplarme a mi nuevo puesto – contestó su hijo haciendo una reverencia de 90°
— Ambos vayan y formen filas. El día de hoy yo llevaré a cabo su entrenamiento – declaró el Jefe de Brigada.
Y Jungkook supo que iba a ser el peor entrenamiento que había tenido hasta ese entonces, sin embargo, también sabía que con todos los casitigos sufridos por el Sargento, podría soportarlo.
Los ejercicios puestos por el Jefe de Brigada no se basaban en la cantidad de vueltas que tenían que dar al circuito o a algún ejercicio en específico, sino al tiempo que debían hacerlo.
40 minutos de circuito.
1 hora de lagartijas.
45 minutos de correr.Si eras mas rápido terminabas haciendo más vueltas que los demás y si eras muy lento tenías al Jefe de Brigada gritándote que eras un incompetente marica que no hacía nada bien.
Algunos se habían desmayado antes de terminar la última parte del entrenamiento. Los había puesto a hacer diferentes posiciones con las armas, solo se escuchaba su voz pronuciando una y otra vez.
— ¡Primera posición! ¡Quinta posición! ¡Tercera! ¡Descanso!.
Cada vez cambiaba el patron para saber quién estaba poniendo atención y cuando alguien se equivocaba todos tenían que hacer un minuto de plancha.
En cuanto se dijo que el entrenamiento había terminado, los soldados terminaron en el piso. Unos vomitaban, otros juraban que veían borroso o que no podrían levantarse al día siguiente.
Sin embargo, Jungkook seguía de pie en su alineación y posición de descanso. Veía fijamente al frente fingiendo no tener miedo al hombre que era su padre.
— Soldados, la próxima vez que se pregunten porqué Jeon Jungkook es el Cabo, recuerden este momento en el que todos están tirados en el piso como mariquitas y él está parado como todo un hombre.
Después de decir eso el Jefe de Brigada se fue.
Los ojos de Jungkook se habían llenado de lágrimas y no creía poder controlarlas por mucho tiempo.
— Pueden retirarse, soldados. Si necesitan atención médica... Avisen a Enfermería. – fue todo lo que dijo para poder irse pronto.
No podía ir a su cama porque aún compartía aquel lugar con los demás Cabos.... No quería ir donde Yoon o Hobi porque no quería preocuparlos... Así que lo único que se le ocurrió fue ir a los baños, se encerró en un cubículo y comenzó a llorar.
No podía contenerse, los sollozos salían de él sin poder controlarlos y sería un gran problema si la persona equivocada lo escuchaba.
— ¿Estás bien? – escuchó que alguien le preguntaba, reconoció la voz como la de aquel chico que había retado a su padre y enjugó sus lágrimas rápidamente.
Aclaró su garganta un par de veces y decidió salir, se iría de ahí rápido sin explicaciones.... Eso sería lo mejor...
— Estoy bien – contestó aunque su voz falló nuevamente.
— ¿Jungkook? – preguntó aquel chico ahora con un poco de culpa.
— Solo vete, por favor – pidió el Cabo.
Dejó pasar unos minutos, ya no escuchó a aquella persona y decidió salir.
Pero Jungkook se había topado de frente con aquel soldado que estaba recargado en la pared jugando con sus manos.
— Te pedí que te fueras... – se quejó Kook mientras se dirigió a lavar sus manos y de paso su rostro.
— Quería pedirte disculpas... Por lo que dije antes... Y por haber provocado a tu padre... – comenzó a decir el soldado.
— Me dejaste en ridículo frente a él... Has ignorado todas mis ordenes desde un principio y te has burlado de mí... ¿Por qué debería disculparte? – espetó Jungkook
— Yo... Supuse cosas de ti... Pensé que eras como cualquier hijo de militar presumido y con privilegios... Pero hace rato vi tu mirada de miedo frente a tu padre... Y supe que estuve equivocado... – el soldado se inclinó en una reverencia de 90°
Jungkook suspiró.
— Levántate, ¿Cuál es tu nombre? – preguntó dándose cuenta que no sabía los nombres de su pelotón.
— Lee Seok-min, señor... – respondió el soldado volteando a verlo y sonrió — Pero puedes decirme DK.
— No lo haré. No pienso ser cercano a ti – admitió dándose la vuelta para irse.
— ¿No podríamos llevarnos bien? – preguntó entonces el soldado sosteniendo su brazo para detenerlo.
— Puedo pensarlo.
Fue así que Jungkook se fue y decidió que era momento de comer algo, regresar al dormitorio y esperar a ver a sus novios para contarles todo lo sucedido. Tenía un poco de miedo que pudieran reaccionar mal, sobretodo Hoseok pero no podía esconderles aquel suceso...
Aparte... ¿A que se refería Lee Seok-min con llevarse bien?
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El sargento Jung [Finalizada]
FanfictionJung Hoseok es el sargento más estricto y reconocido de la milicia, por eso nadie pensaría que en sus cortos tiempos de descanso es solo un bebito de 4 años. Mucho menos pensarían que un simple soldado razo llamado Jeon Jungkook cambiaría su vida.