Estados Unidos, Universidad UCLA
28 de septiembre de 1983Dahyun gritó con urgencia al ver que se hacía tarde y Chaeyoung seguía profundamente dormida. -¡Chaeyoung, despierta! ¡VAMOS A INICIAR NUESTRO ÚLTIMO AÑO!-
Desde su cama, Chaeyoung se revolvió y respondió con desdén -¿Y si no me quiero parar?-. Al observar que Dahyun alzó su guitarra eléctrica, amenazando con tirarla al piso si no se levantaba, su tono cambió rápidamente. -¡Ni se te ocurra! Ya me paro, pero no la rompas!- gritó, apresurándose a salir hacia el baño para ducharse.
Mientras tanto, Dahyun se mantuvo en la cocina, preparada con dos panes rellenos de jamón y queso, junto a unos refrescantes jugos de naranja. Mientras esperaba, escuchó el sonido de la puerta siendo tocada. Al abrirla, se encontró con el trío japonés, siempre listo para traer consigo una buena dosis de problemas. ¡Dios mío! Aquellas tres japonesas parecían tener un talento especial para crear caos, a pesar de que ellas mismas insistían en que eran Dahyun y Chaeyoung quienes causaban los líos.
En esos momentos, Dahyun no sabía exactamente quién traía los problemas, aunque tenía claro que reunir a las cinco en un mismo lugar no era una buena señal.
-¡Qué tal! -saludó al ver a las tres chicas.
-¡Hey, Dub! ¿Y Chaeyoung? -preguntó Mina, pero no tuvo que esperar mucho por la respuesta. Un sostén voló hacia la cabeza de Dahyun.
-¡Chaeyoung! -gritó Dahyun desde la puerta, y en ese instante, Chaeyoung salió del baño, completamente desprevenida y desnuda, absorta en su música a todo volumen.
-¡Conchale, Dahyun! Te estoy pidiendo desde el baño que me pases la afeitadora. ¡Esta Selva amazónica en la entrepierna y las piernas no se va a podar sola! -exclamó, sin darse cuenta de la presencia de las tres japonesas.
-¡Hey, Chaey! -dijo Sana entre risas, disfrutando del momento. Se rió aún más al ver cómo Chaeyoung se sonrojaba y se devolvía al baño a toda velocidad.
Dahyun intentó contener la risa, pero fue imposible.
-Mejor pasen, que como pudieron ver, Chaeyoung no está lista -dijo entre carcajadas. -Sí dejas a Chaeyoung, bañándose con música puesta en la radio, no se entera de nada-
-Tiene que apurarse, si no llegaremos tarde -dijo Momo mientras se sentaba en la cama de Dahyun, quien se acomodó a su lado.
-¿Nosotras llegamos temprano a algún lado acaso? -respondió Sana desde la cama de Chaeyoung, donde Mina también estaba sentada.
-No, pero deberíamos comenzar a hacerlo -replicó Momo con seriedad. -No podemos hacer esperar a las personas, no nos van a esperar toda la vida, o eso dice mi mamá.
-No vas a comenzar con tus frases de tu mamá, ¿verdad? Esa señora y tu papá te tienen muy controlada -se burló Sana, con una sonrisa traviesa.
-¡Mentira! Solo me ayudan a ser exitosa y aprender a hacer dinero -defendió Momo, cruzando los brazos.
-O hacerse dinero ellos contigo -añadió Sana, disfrutando de la provocación.
-Yaaaa... Sanita, deja a Momo. Solo quiere que no lleguemos tarde -intervino Dahyun.
-Y llegó el príncipe azul con su espada a salvar a su princesa -bromeó mina, haciendo que las presentes suelten una carcajada menos Momo qué rodó los ojos.
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Good old fashioned lover boy [Dahmo]
Fiksi PenggemarEn la década de 1980, dos jóvenes asiáticas llegan a una universidad en Estados Unidos: una pianista de Corea del Sur, quien se vio obligada a abandonar su país debido a la grave situación política y social, y una bailarina de Japón, que persigue su...