TU LO LLAMAS NECROMANCIA, YO LE DIGO HACER AMIGOS [TRADUCCION]

CAPITULO 9

Antes que nada quiero agradecer por su ENORME AYUDA a Usunomi

Si estan leyendo esto hoy entonces deben agradecerle a el, que le metio ganas a todo, yo solo lo corregi, si pudiera los haria yo mismo, pero la escuela y las pruebas son una mierda y nada garantiza que una semana de pruebas no termine en yo olvidandome de esto.

Al menos ya hay alguien que me pateara el culo para recoordarlo jajajk

Empezamos (tamadre, debo hacer un separador para aqui tambien xd)

Izuku no se sorprende demasiado con lo que encuentra cuando se encuentra con su contratista.
En la habitación que Maestro Star les ha preparado, hay una anciana alta y delgada, acompañada de una mujer más joven, probablemente de unos treinta y tantos años, con cabello negro y ojos rojos.
Por lo que ha oído, mucha gente se ha reunido para poner en marcha este contrato, lo que le hace preguntarse por qué han enviado a esas dos a reunirse con él.

Ya ha decidido aceptar el contrato. El motivo de esta reunión es simplemente entender el lado de los contratistas. Algo con lo que no es muy difícil empatizar.

“La gente piensa que el Destripador sólo apareció hace unas semanas, pero son malditas patrañas”, le explicó la anciana. “El Destripador ha estado aterrorizando las calles durante años, y los héroes hicieron cualquier cosa por nosotros. No hay fama para ellos aquí, así que no les importamos. Sólo recientemente, el Destripador se ha vuelto más atrevido. Empezó a cazar fuera de su zona de confort, y la prensa se fijó en él”.

“Y, sin embargo, los héroes no parecen interesados ​​en atraparlo”. La mujer más joven añade. “El Destripador mató a docenas, tal vez cientos de personas desde que comenzó, y los héroes no hacen nada”.

“Así que fuimos al gremio”, añade la anciana. “Pero somos una comunidad pobre. Los mercenarios trabajan por dinero y no tenemos lo suficiente para un contrato como este”. Pone una bolsa sobre la mesa y empuja hacia Izuku. “El Destripador mató a mi hija. Pasaron semanas hasta que se identificó el cuerpo”.

Izuku mira a la mujer más joven.

“Estaba con ella cuando el Destripador atacó”, explica. “Mi don se llama Rastreador. Puedo encontrar la ubicación exacta de cualquier persona siempre que sepa su nombre y rostro. Si solo conozco a uno de ellos, puedo señalar un área de 2 km donde sé que está”.

Izuku mira la bolsa, luego vuelve a mirar a la anciana.“¿Qué hay en la bolsa?”, pregunta.

“Todo lo que tengo”, responde ella. “Todo lo que tenemos. Reunimos todo lo que cualquiera de nosotros tenía para pagar por esto”.

Dentro de la bolsa había muchas cosas. Dinero, baratijas y cualquier otra cosa que pudiera tener algún valor monetario o sentimental.

“Entonces, ¿estás dispuesto a dar todo lo que tienes por esto?”, pregunta Izuku.

“Mientras el Destripador esté suelto, ninguno de nosotros podrá vivir de verdad”, responde la anciana. “Cualquiera de nosotros puede ser su próxima víctima. Y ya nos dimos por vencidos con los héroes”.

Izuku asiente, luego mete la mano en la bolsa y saca una sola cosa. Un hermoso reloj de bolsillo plateado.

“Pago aceptado”, dice Izuku y empuja la bolsa hacia la mujer. “Mi equipo se encargará del Destripador”.