CAPÍTULO 05🔞

203 23 0
                                    


El rubio palideció por un momento, ¿Era real? No, quizás ya había demasiado alcohol en su organismo.

—Hola, guapo... Yo también me porte mal, reprendeme a mi— Misteriosamente, Jimin se sintió muy molesto cuando Taehyung hizo ese comentario.

—Lo lamento, pero tengo instrucciones de únicamente reprender al novio antes de casarse.

—Uy te equivocaste de departamento entonces, porque aquí ya no hay boda.

—¿Qué?

—Mierda ya llegaste!— Jin se para de las piernas del moreno para recibir a Jungkook —Pasaaaa— Lo arrastra prácticamente hasta la sala de estar —Bueno, aquí ya cada quien para su casa— Saco a todos a empujones a pesar de los reproches, mientras Namjoon y el bailarín se saludaban como si tuvieran tiempo sin verse, cosa que le pareció extraña al rubio. Hasta que Jin toma al moreno por un brazo —Ya nosotros nos vamos también, que disfrutes de tu regalo, Minnie, lo mereces— El castaño le giña un ojo antes de salir de dicho departamento con el moreno.

Dejándolos a los dos completamente solos, el bailarín comienza a inspeccionar con su vista el departamento y llegó a una sola conclusión: Habían tomado demasiado, había mucho desorden y botellas de whisky en cada esquina, confirmo todo cuando observa a Jimin; mejillas en un rojo intenso, ojos brillantes y tenía una botella de whisky en la mano.

—Entonces... ¿Que haces aquí?

El azabache lo mira con sus ojos oscuros, dándole una sonrisa socarrona, y escaneando todo su cuerpo.

Eso hizo que el rubio se estremeciera.

¿A caso su estado de ebriedad podría irse a la mierda por una descarga de adrenalina?

Al parecer si, porque mientras el bailarín se aproximaba a él, él veía todo claramente, escuchaba todo claramente y sentía todo tan intenso, demasiado intenso cuando ese hombre ya está a centímetros de él y lo tomo de la mandíbula sintiendo la respiración contraria justo sobre sus labios.

—¿Cómo es posible que estés más hermoso?— Sin soltar su agarre de su mandíbula, acariciar un poco está con su dedo pulgar.

Y ahí estaba, esa voz tan gruesa que hacía que hasta sus huesos reaccionarán, mientras el azabache detallaba su rostro, él rubio sentía su tacto cálido en su mandíbula y con solo ese pequeño roce el podía sentir como su voluntad flaqueaba... Al igual que sus piernas.

No podía quitar la mirada de los labios del más alto, esos labios finos pero tan jugosos, no los habia podido olvidar ni por un segundo, esos labios le tocaron hasta su espíritu, pero aún así anhelaba sentirlos otra vez... Tanto así que sintió su cuerpo moverse por voluntad propia al ponerse de puntitas y así intentar besar los labios contrarios.

Pero el bailarín era muy alto, o quizás él era muy bajo, la verdad es que no pudo alcanzar los labios del azabache, así que solo le quedó tomarlo por el cuello de su uniforme y rogar por ese beso.

—Por favor... Bésame— Se escucho un tanto lastimera su suplica, pero no le importo, solo deseaba ser besado por el hombre que había invadido su mente y corazón —Besam...

Sus palabras quedaron atrapadas en los labios del azabache y su ardiente y fogoso beso tan demandante, joder, de esto hablaba él, sentir como ese hombre tan hermoso lo besaban con tanto deseo y desesperación, desbordando toda la lujuria que el pequeño rubio le hacía sentir.

El bailarín lo toma por los muslos y lo alza obligando al rubio a enredar sus piernas en sus caderas y sin romper el beso lo empotró salvajemente en la primera pared que encontró, haciendo gemir de dolor al rubio.

Take me (Kookmin) +21 ConcluidaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora