Destino/Harem de semisirvientes

Capítulo 7: Capítulo Siete

Capítulo siete

QQ: ¡Ha pasado demasiado tiempo! Comenzar esta historia con mi búsqueda aún en curso probablemente no fue mi mejor idea, pero me alegro de haberlo hecho de todos modos. Disfrútenla.

Ao3: Notas:

(Ver el final del capítulo para ).

El teléfono sonó sólo tres veces antes de que alguien lo atendiera. Una voz sarcástica respondió a la llamada, y Shirou casi podía imaginar la cara burlona de Shinji. —Emiya —dijo, con la voz cargada de desprecio. 

—Shinji —dijo Shirou. Rin estaba a su lado, escuchando lo mejor que podía—. Sabes por qué estoy...

—Oye, Emiya. ¿Qué tal si hacemos un trato? —preguntó Shinji. Interrumpió a Shirou con facilidad, sin siquiera parecer un poco interesado en lo que había estado diciendo—. Te daré a esta puta inútil, si a cambio me entregas a Tohsaka.

Una mirada a Rin fue suficiente para que Shirou se diera cuenta de lo repugnante que era esa idea para ella. Era peor para él. Incluso la idea de que su Rin anterior cayera en manos de otra persona, y mucho menos en las manos que lastimaron a Sakura de esa manera, hizo que su estómago se revolviera y su visión comenzara a ponerse roja. Estaría muerto antes de que eso sucediera. "Ni una oportunidad en el infierno".

—Vamos, Emiya. ¿No crees que es justo que ella tenga la oportunidad de sentir a un hombre de verdad dentro de ella?

Shirou sintió que de repente todo se quedaba en silencio. Era como si estuviera tan enojado que todo lo que podía hacer era concentrarse en completar su misión. "Nos vemos en la frontera del bosque. Conoces el lugar. Arreglaremos esto allí".

Colgó antes de poder detenerse.

Rin parecía enfermo, tan enfermo como se sentía por dentro. "Ese gusano asqueroso..." dijo en voz baja.

—Sí. Nos ocuparemos de él juntos —dijo Shirou. Tal vez pasar otro día descansando sería mejor para él, pero no podía.

Una mirada de feroz determinación apareció en los ojos de su sirviente. "Está bien, Maestro".

Tal vez tratar de arreglar las cosas de nuevo el mismo día fue un error táctico, pero Shirou y Rin no podían soportar la idea de dejar a Sakura en las garras de Shinji por otra noche. Sin considerar las cosas que él había dicho que quería hacer con Rin. Shirou no quería pensar que incluso Shinji lo haría... no con su propia hermana, ¿seguramente? Pero le daban ganas de vomitar solo de pensarlo, y no podía soportar la idea de irse a dormir esta noche sano y salvo sabiendo que ella corría el riesgo de... eso.

Entonces, tenían que resolver esto ahora. Ya estaba oscuro cuando llegaron a las afueras del bosque, pero eso era bueno a su manera. No habría nadie más cerca que pudiera molestarlos o resultar herido debido a su enfrentamiento.

—Aquí, Maestro —dijo Rin. Ella estaba vestida con su ropa de batalla muy reveladora, lo que despertó en él la sensación de que este no era el momento para lidiar con eso. En sus manos había una espada larga y roja, que le estaba pasando.

—Hrunting —dijo Shirou, sintiendo que se movía en sus manos. El Noble Phantasm era un arma poderosa, perfecta para un novato como él con su habilidad de siempre dar en el blanco. Él y Rin habían decidido que era la mejor opción para él después de una discusión. Su corazón todavía anhelaba esas espadas gemelas de ella... pero eso era solo sentimentalismo que podría hacer que Sakura muriera—. Gracias, Rin. ¿Cómo te sientes?

—Listo, Maestro —dijo. Tan pronto como le entregó la espada, las dos espadas en las que Shirou había estado pensando aparecieron en sus manos. Hermosas armas, construidas no para el combate sino simplemente por el placer de hacerlas. Shirou sabía que era una tontería, pero no pudo evitar sentirse celoso. Ojalá pudiera hacer armas como esa—. Solo ten en cuenta el plan. Mantendré a Sakura a raya tanto como pueda. No debería ser nada difícil derrotar a Shinji con eso.