Kanoko Mori, la hermana de Hiroki, despertó en el cuarto de su hermano, a su lado se encontraba Kokujin, madre y prima cogiendo.
Ella los miro por unos segundos, hasta que Kokujin se dió cuenta de que estaba despierta. Kokujin le dedicó una mirada que decía "acercate".
Kanoko lo hizo, no dijo nada, era algo rutinario, Kokujin había llegado a su vida después de que este mismo había golpeado a su hermano menor.
A su querido y amado hermano menor.
Ella lo había confrontado pero, este en cambio la había cogido, y la había hecho "suya".
O eso es lo que le hacia creer a Kokujin, la verdad era otra; al principio si fue así, deseo estar con Kokujin pero, la razón no era su enorme miembro, sino, otra cosa, eso era un sentimiento que había comenzado a desarrollar por su hermano menor.
Ese sentimiento provocaba reacciones en ella, reacciones que no podía controlar, por eso, cada vez que lo veía, se le insinuaba, lo provocaba, lo trataba de una manera en que hermanos no lo hacían, algo que la hacía sentirse emocionada y a la vez asqueda de si misma.
Por eso al principio acepto a Kokujin, pensó que ese hombre la haría olvidarse de ese sentimiento.
Sin embargo, con el paso del tiempo, Kokujin dejo de ser suficiente, no podía satisfacerla como al principio, no podía provocarle un sentimiento mayor que el le generaba su propio hermano.
Se obligo asi misma a aceptar a Kokujin y gozar de el pero, el sentimiento no desapareció, tal vez muy en el fondo, no quería que desapareciera.
Al final, acepto ese sentimiento repulsivo, pensó en muchas maneras en las que Hiroki la viera más que su propia hermana por que, a pesar de que Hiroki reaccionaba a sus insinuaciones, no sedia, no iba más allá de eso.
Eso le molestaba, Hiroki no pasaba al tabú pero, en vez de aceptarlo, se negó a ello, se negó a que Hiroki no lo viera como algo más.
Su familia había sido la típica familia tradicional japonesa, su padre, era un hombre ejemplar, cariñoso, amoroso y detallista, su madre era una ama de casa cariñosa, bondadosa y cariñosa.
Ella, cuando su padre murió, no lo acepto, al ser la mayor era a quien más acudía su madre para hacerse cargo de las cosas.
Nunca quiso serlo pero, lo acepto, acepto el ser el punto de apoyo de su madre, cuidado de su hermano cuando aún era pequeño, ayudó en el hogar y se hizo fuerte.
Pero, ¿Quien se convertiria en el soporte de ella?, no lo supo hasta qeu después de varios días, fue solo una sonrisa, solo eso, una sonrisa de Hiroki de un pequeño Hiroki.
Fue ahí cuando se dió cuenta, Hiroki se había convertido en su soporte, en su luz.
Quizas fue ahí cuando desarrollo "eso", aunque no habían razones para desarrollar ese sentimiento, lo hizo, creció en ella de manera constante, veia en la sonrisa de Hiroki a un hombre que podia darle "eso".
Quería tener la posibilidad de que Hiroki la quisiera más allá que una simple "hermana".
No fue hasta que Kokujin había dicho que quería cogerse a su madre, que vió una oportunidad, una manera en la que ella se convertiria en la mujer más importante de su vida, la única mujer en su vida.
Haría que Hiroki se quedará solo, sin vida y sin salvación, de esa manera, entonces ella aparecería como una esperanza, como la unica esperanza.
Fue algo que se le había ocurrido después de ver algo sobre el síndrome de Estocolmo.
Ella se convertiria en la unica salvación, en su luz, de esa manera, Hiroki la aceptaría y la amaría como una mujer.
Ella lo reconstruiria, como el hombre hecho para ella, lo armaría con algunos de los pedazos rotos y agrageria unos nuevos, Hiroki se convertiria en su hombre perfecto, en una nueva luz que ilumianaria aún mas su vida.
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Impacto Hiroki
Fiksi PenggemarHabían pasado tres años desde que Kokujin entró a su vida, tres años en los que ha soportado los abusos por parte de sus seres queridos que lo trataban como alguien inferior, mientras veía como las mujeres más importantes de su vida eran tomadas por...