Juego Optimista

Capítulo 69: Afecto Fraternal

"Básicamente, así es como funciona", digo, terminando mi explicación, mientras observo a Weiss y Blake entrenando en el campo de entrenamiento. "Lo sé, suena como algo sacado de una película erótica, pero no miento".

—No, no. Te creo —suspira Ozpin, quitándose las gafas para frotarse el puente de la nariz—. Aunque admito que me habría parecido más fascinante si no fuera tan ridículo.

Después de la reunión poco satisfactoria entre Yang y Raven y de mi advertencia muy cortés a esta última, llevé a Ozpin aparte para poder explicarle todo el asunto del semen mágico. Después de todo, él sintió que la magia de la rubia se estaba descontrolando después de que ella comenzó a perder la calma.

No puedo ocultarlo por mucho más tiempo, pero bueno. Estaba planeando contárselo ahora que estoy casi segura de que Salem vio a una de mis chicas lanzando hechizos. Si mi mayor enemigo ahora está al tanto, entonces probablemente debería contárselo a mi aliado.

También pensé en mostrarle la magia en acción. Aunque Blake no ha descubierto qué tipo de magia tiene, Weiss se está familiarizando mucho con la suya, incluso la está integrando en sus glifos, lo cual es muy interesante. Después de todo, el polvo es solo magia cristalizada. ¿Por qué su apariencia no debería ser compatible con su magia?

También le he contado sobre el otro mundo al que puedo acceder a través de las mazmorras, porque ocultarlo por más tiempo no tiene sentido. La magia que uso, aunque similar, sigue siendo diferente en comparación con la de Ozpin o las Doncellas. Obviamente, él percibió la diferencia en mí, pero ahora que mis chicas la tienen, es demasiado sospechoso.

No entré en detalles, pero eso se debe principalmente a que no sé mucho sobre Teralos. Más precisamente, no lo he experimentado lo suficiente. En total, creo que he estado allí unas veinte horas. Normalmente me lleva entre tres y diez minutos completar una sola mazmorra, lo cual no es mucho.

Al principio, Oz no me creyó, pero no hay forma de negar mi historia ahora que Ozpin había visto a dos de mis chicas usando magia. El mismo tipo que yo uso. Maná puro, sin ningún elemento o influencia.

—Pensar que me has ocultado tanto —murmura y luego sonríe, poniéndose las gafas—. No me extraña que no haya podido encontrar nada sobre ti cuando apareciste por primera vez. Apareciste literalmente de la nada.

—Pensé que estarías más enojado conmigo —señalé.

—No, eso me convertiría en un hipócrita. —Ozpin negó con la cabeza—. Todos tienen sus secretos, señor Astera. Aunque debo decir que, desde una perspectiva táctica, ha tomado la decisión correcta al decirme ahora que parece estar seguro de que Salem conoce este don que posee.

Llamar a mi semen mágico un "regalo" me resulta jodidamente gracioso. Cada vez que lo pienso es más estúpido, aunque es muy útil. Sin él, no creo que Ruby hubiera derrotado al Titán. Diablos, Weiss y Blake podrían haber muerto en la mina.

"Sí, nunca he conocido personalmente a Salem, pero es aterradora", respondo. "El hecho de que haya visto toda la batalla sin que yo me diera cuenta es desconcertante".

Me recuerda que pronto tendré que terminar esa mazmorra legendaria. Ya llamé a Velvet para avisarle que me tomaré toda la semana libre. No creo que necesite tanto tiempo para una mazmorra, pero pensé que primero me prepararía, obviamente.