Todos llevamos cadenas en algún momento de nuestras vidas, pero... ¿Podrán nuestros protagonistas liberarse de las ataduras que recorren su corazón? Y más importante, apresan su alma.
El agujero se seguía abriendo por la fuerza ejercida por el brazo que sobresalía de este. Gnit caminó lentamente hacia este extraño fenómeno.
- Gnit: No puede ser... ¡Lo has conseguido!
- Noelia: ¿Qué, de qué mierda hablas?
- Gnit: Un portal... Si... ¡Ahora nos expandiremos más y más!
- Noelia: ¿Para eso lo querías? Pero más importante... ¿Cómo sigue vivo?
El portal, hecho de liquido negro, término de abrirse dejando ver una oscura figura, la cual se acercó a la luz. Era Heaven, que, a medida que caminaba y más clara se veía su imagen, más incierto era la forma que ha tenido de sobrevivir, pues sus heridas no solo eran mortales, sino que no debería tener la suficiente sangre en el cuerpo para poder caminar tan tranquilamente.
El agujero en la máscara y en su cabeza se apretaba cada vez más, hasta que la bala que estaba incrustada en su cerebro salió por si sola, y el agujero se cerró. El muñón que tenía provocado por la desaparición de su brazo de alargó a base de producir más de ese liquido negro, el cual se desbordaba por cada herida de su cuerpo. Las marcas negras de debajo de sus ojos ahora estaban abiertas, como si fueran ojos. Una brillante luz emanaba de sus oscuras cuencas oculares y una boca parecía haber sido dibujada en su máscara... No... No era un dibujo, esa boca se abría dejando ver una boca llena de una maligna luz, como la de sus propios ojos.
Ojos aparecieron por su pecho, por sus brazos, por su espalda... El pelo permanecía en punta hacia atrás como si la energía que emanaba fuera tanta que no podía caer.
- Heaven: Me disculpo Noelia... Por mis malos modales.
- Noelia: ¿Qué?
- Heaven: Dije que no nos volveríamos a ver...
El brazo de Heaven terminó de regenerarse por completo, más no parecía tranquilo, más bien estaba muy alterado... Estaba en un estado de éxtasis extremo después de haber vuelto de la muerte. Sufría tics nerviosos haciéndolo ver más bien poco humano.
- Heaven: ¡ASÍ QUE SUPONGO QUE ME TRAGO MIS PALABRAS!
Gnit se acercó a Heaven por completo y le intentó poner la mano en la cabeza a forma de caricia. Pero...
- Gnit: Hermano... Por fin podremos continuar... Menos mal que estás vivo... ¡Acabemos con esa zorra mientras estamos a tiempo!
- Heaven: Haces mucho ruido...
- Gnit: ¿Cómo?
Heaven golpeó fuertemente el rostro de Gnit con su puño envuelto en una extraña energía, también rompiendo su mano derecha que estaba en su trayectoria de impacto, haciendo sangrar su cara y mano, y también lo mandó a volar, una vez más.
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- Heaven: Me has mandado a morir, has admitido que solo me quieres para abrir no se qué puta mierda de portales, ¿y ahora quieres que te ayude?
